El pasado viernes la NASA anunciaba que daban comienzo las últimas pruebas de la nave Crew Dragon 'Demo-2' de SpaceX, empresa espacial de Elon Musk, que será lanzada en los próximos meses con varios astronautas a la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés).

Este lanzamiento, que todavía no tiene fecha, será el primero de una empresa privada en enviar astronautas hasta la ISS. De este modo, Musk y SpaceX ganan la carrera espacial de las organizaciones privadas para poner astronautas en la estación internacional. No obstante, habrá que seguir atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos ya que, a nivel privado, hay otros objetivos en el punto de mira, como son la Luna y nuestro vecino Marte.

Por el momento, no hay una fecha confirmada para este lanzamiento, pero lo más probable es que no tarden más de dos o tres meses en subir hasta la ISS a los astronautas de la NASA Bob Behnken y Doug Hurley. Será enviado en un cohete Falcon 9 de la misma compañía y que recientemente ha terminado una de sus pruebas clave con éxito.

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SpaceX contra Boeing

La confirmación de la NASA de que será SpaceX la que envíe a estos astronautas a la ISS es una mala noticia para Boeing, otra de las empresas privadas que llevaba la delantera en cuanto a la posibilidad de realizar este tipo de lanzamientos en primer lugar.

Sin embargo, Boeing sufrió una serie de reveses a finales de 2019, que han dejado a esta compañía fuera de esta carrera: "Si bien ambos proveedores han tenido sus propios desafíos, Boeing se ha visto acosado por numerosos fallos de software surgidos durante el debut de lanzamiento orbital de Starliner en diciembre", según informan desde Teslarati.

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Aunque en un primer momento, según aseguran desde Teslarati, tanto el tuit publicado como la comunicación de la NASA en su blog, "afirmaba inequívocamente que "la nave espacial SpaceX Crew Dragon [asignada al] primer lanzamiento de la tripulación desde suelo estadounidense desde 2011 ha llegado al sitio de lanzamiento"; después la agencia estadounidense modificó sus palabras para "evitar decir o implicar algo que pueda percibirse como incluso un poco crítico con Boeing", señalan desde Teslarati.

Por tanto, todo apunta a que será SpaceX, y no Boeing, la primera empresa privada que lleve hasta la Estación Espacial Internacional a los astronautas estadounidenses.