La epidemia de coronavirus en China ha disparado las ventas en línea de mascarillas médicas, también conocidas como cubrebocas. El problema es que, como en toda situación de emergencia, hay agentes malintencionados que buscan sacar provecho al vender productos falsos o de mala calidad.
Lo anterior ha sido reportado por el diario chino The Paper, quien informa que Alibaba y JD.com se encuentran monitoreando las ventas ilegales de mascarillas. Ambas cadenas, consideradas como las dos más grandes de China, han detectado más de 15 tiendas acusadas de vender máscaras falsas y de mala calidad, de las cuales 5 fueron directamente reportadas a la policía.
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En el caso de Alibaba, el conglomerado anunció por medio de Weibo que han colaborado con agencias policiales para investigar la fuente y tomar medidas severas contra los delincuentes que fabrican mascarillas de baja calidad. Ali Security dice haber detectado 128 casos de producción y venta de estos productos, dando pie a la detención de 65 personas.
Alibaba fortaleció la revisión de mascarillas desde hace semanas
Desde mediados de enero, Alibaba ha fortalecido la revisión de mascarillas y otros productos. La empresa ha utilizado algoritmos de detección de publicaciones falsas o conflictivas, lo que ha derivado en la suspensión, cierre definitivo de la tienda, o en los casos más severos, un reporte inmediato a las autoridades.
El uso de cubrebocas es una de las medidas de protección para evitar el contagio del coronavirus. Desde comienzos de enero, la demanda por este tipo de productos se ha disparado en China y otras regiones de Asia. Empresas como JD han tenido que ofrecer un subsidio a los vendedores de su plataforma con el fin de que los precios se mantengan bajos.
Tiendas como Youpin, la plataforma de crowfunding fundada por Xiaomi, también ha sufrido el embate del coronavirus. El pasado 28 de enero la tienda en línea se vino abajo debido a la enorme demanda de mascarillas médicas. El paquete con 20 unidades, que se vende en aproximadamente 5 euros, se agotó casi de inmediato, provocando una caida temporal del sitio que se restauró horas más tarde.
