Spotify vuelve a la carga contra aquellos usuarios que formen parte del Plan Familiar y no residan en el mismo domicilio, característica imprescindible, según los Términos y condiciones de uso, si se quiere optar al mismo. Es un movimiento que ya vimos el pasado año de forma temporal en determinados países y que parece que, ahora sí, llega para quedarse.
El Plan Familiar es a día de hoy uno de los más populares entre los usuarios de pago del servicio, ya que permite hasta a seis personas disfrutar de los servicios premium de la plataforma de música en streaming. Esto incluye la escucha sin anuncios y la posibilidad de descargar canciones para tener acceso a ellas sin conexión, dos de las características más populares. ¿El problema? Infinidad de estos planes no están conformados por familias reales, sino por grupos de amigos o conocidos que sea asocian con el fin de pagar menos de lo que costaría el plan individual (2,5 euros al mes, si las seis plazas están ocupadas, frente a los 9,99 €/mes de la cuenta estándar).
Spotify crece en suscripciones gracias a los planes familiares, pero sigue perdiendo dinero
La empresa sueca busca terminar con estos usuarios que incumplen la norma de una manera similar a la ya buscada el pasado curso: pedir información de ubicación mediante el GPS de los dispositivos móviles de los usuarios. Así lo expresan en un cambio en los citados Términos, reportado por CNET:
Requisitos y verificación
A. Para poder optar a la Suscripción al Plan Familiar, el titular de la cuenta principal y los titulares de las cuentas subsidiarias deben ser miembros de la misma familia y residir en el mismo domicilio.
B. Tras la activación de una cuenta subsidiaria del Plan Familiar, el usuario tendrá que confirmar su domicilio.
C. Es posible que, de vez en cuando, se pida volver a confirmar el domicilio, con el fin de verificar que se siguen cumpliendo los requisitos para acceder al servicio.
Natural controversia
La solicitud de la ubicación personal de los usuarios, no obstante, ofrece cierto recelo por parte de los mismos, aunque desde la compañía aseguran que esta se utilizará únicamente con el fin descritos. Por ahora, eso sí, no se sabe si será una política que Spotify comience a desarrollar de manera activa –fue introducida el pasado día 19 de agosto– o si se trata únicamente de una actualización de cara al futuro.
La otra parte del debate alrededor de estos nuevos Términos se sitúa en el hecho de que uno puede pertenecer a una familia real y no vivir bajo el mismo techo que quien se encuentra pagando la suscripción. ¿Por qué forzar a que todos los usuarios se encuentren en una residencia común? Probablemente, porque es la única solución que el servicio de streaming ha encontrado para verificar que no se trata de familias falsas.
Spotify necesita usuarios de pago y ha cambiado radicalmente su período de prueba
Sea como fuere, natural que Spotify quiera controlar a quienes abusan del servicio, dado que los planes de pago son la principal fuente de ingresos de la empresa y, por consiguiente, les interesa que sea el número de cuentas individuales el que aumente en lugar de aquellas asociadas a un Plan Familiar. Hasta dónde está dispuesta a llegar la firma para garantizar esto es algo que aún está por ver.