]A menos que hayas vivido bajo una piedra durante las últimas semanas, ya lo sabes: Joker es quizás una de las promesas cinematográficas del año con todas las posibilidades de convertirse en un éxito de taquilla sin precedentes para Warner Bros y la pieza que devolverá el brillo al deslucido universo cinematográfico DC. No obstante, el recorrido de la película, hasta convertirse en una polémica revisión del cine de superhéroes, ha sido largo y complicado, en especial a la vista del colosal triunfo de la franquicia Marvel.

Para el director Todd Phillip, el hecho de enfrentar el éxito taquillero del Universo Cinematográfico Marvel supuso un reto que decidió asumir de una manera peculiar e ingeniosa: alejándose todo lo posible de lo que hasta ahora ha creado en la pantalla grande la Casa de las Ideas. Una decisión que le llevó a tomar caminos argumentales y visuales por completo distintos a los que hemos visto durante los diez años del auge de películas de superhéroes.

Se trató por supuesto de una decisión arriesgada, sobre todo por el hecho que hasta ahora DC ha tratado obtener en su universo expandido en cine un nivel de relevancia parecido al marvelita, para lo cual ha usado la misma estrategia de traducir las historias de sus personajes más relevantes al lenguaje cinematográfico. No obstante, después del fracaso de varios de sus proyectos emblemáticos —en especial, el muy sonado que rodea todo lo concerniente a Justice League de Zack Snyder— decidió replantear su método, enfocándose en proyectos individuales con cierto aire autoral que permite explorar todo tipo de posibilidades. Y aunque las futuras películas anunciadas por Warner Bros y basadas en el mundo DC siguen funcionando bajo el mismo Universo, el nuevo tono independiente brindó frescura y sobre todo, un nuevo respiro a un conjunto de proyectos que corrieron el riesgo de naufragar de manera estrepitosa.

El Joker regresa con nueva sonrisa

Sin duda, Joker es el mejor ejemplo de esa nueva propuesta y lo es, no solo por su aproximación novedosa a uno de los personajes simbólicos de DC, sino por tomar un considerable riesgo en lo argumental y visual. El director Todd Phillips confesó de hecho, para una entrevista a ComicBook, que una de su intención primordial era “mantenerse al margen” de lo que hasta ahora ha planteado Marvel para mostrar el universo superheróico.

“No se puede vencer a Marvel, es un gigante. Hagamos algo que ellos no pueden hacer”, comentó Phillips al referirse al proceso creativo que llevó al Joker a convertirse en un film experimental que según lo visto en sus dos adelantos y en palabras de la mayoría de los críticos, rompe lo que hasta ahora ha sido la personalidad del cine de superhéroes. Phillips no solo se atrevió a rozar los límites de la ultraviolencia sino que además, según algunas opiniones del mundo del medio cinematográfico, logró imprimir una personalidad única a un film que de origen, se distancia de cualquier otro al estilo.

Para comenzar, Joker estará centrada en la figura del villano más icónico de la historia de Batman, lo cual supone un riesgo considerable para la solidez del guión. Mientras Marvel se esfuerza por brindar lucimiento y horas en pantallas a sus héroes clásicos, DC toma el camino exactamente contrario y explorará con Joker la posibilidad los lugares más oscuros de sus arcos argumentales emblemáticos. Para la ocasión, Phillips no solo tomó la acertada decisión de romper el clásico equilibrio del bien y el mal, sino de brindar una historia de origen parcialmente alejada del cómic al némesis de uno de sus personajes icónicos.

Ya el actor Joaquin Phoenix comentó días atrás que su encarnación del mítico personaje tendría poco o nada que ver con cualquiera de sus versiones en pantalla o incluso, con sus diferentes historias en el cómic. Las palabras de Phoenix — que aseguró intentó crear algo “por completo nuevo” — parece coincidir con lo que ahora comenta Phillips sobre la necesidad de alejarse del esquema marvelita superheroico.

Joker no es solo una película por completo adulta —que ya obtuvo una clasificación R por sus escenas de violencia explícita— sino que, además, una que analiza al villano desde la misma importancia que al héroe, algo que Marvel intentó en Avengers: Infinity War al centrar la atención del guion en Thanos antes que el resto de los personajes superheóricos. Pero a diferencia del punto de vista marvelita, Phillips intenta que su Arthur Fleck sea una reinvención a toda regla de cómo se concibe el mal dentro del Universo Cinematográfico DC, más allá de mostrar los diferentes matices del personaje.

El Joker ríe otra vez: todas las referencias que usó el director Todd Phillips en la película

La exploración del director sobre Joker además tiene un interesante componente social y cultural, aunque Phillips insistió en que su película no es en absoluto “política”. No obstante, en su sinopsis oficial, puede leerse que se trata de un personaje que “lucha por encontrar su camino en la sociedad fracturada de Gotham”, toda una declaración de intenciones sobre la forma en que el argumento analizará el entorno del personaje como una pieza de enorme importancia para construir su historia.

¿Será Joker una forma de comprender al superhéroe y al villano dentro del matiz de una improbable humanidad? Christopher Nolan lo intentó con su trilogía y de hecho, es su punto de vista sobre la batalla moral que rodea a Gotham, la que Phillips admitió influenció definitivamente el guion de Joker. ¿Podrá la película alcanzar una nueva dimensión sobre el controvertido tema sobre el origen real de los personajes más famosos del cómic? Resta esperar menos de un mes, para conocer la respuesta.

Dirigida por Todd Phillips con guión de Scott Silver, Joker está protagonizada por Joaquin Phoenix, Zazie Beetz, Bill Camp, Frances Conroy, Brett Cullen, Glenn Fleshler, Douglas Hodge, Marc Maron, Josh Pais y Shea Whigham y se estrenará en salas comerciales el próximo 4 de octubre.