Boeing sigue sin poder certificar sus aviones 737 MAX después de los dos accidentes ocurridos hace unos meses. Recientemente se descubrió que la actualización de software que solucionaría el fallo principal, no puede ejecutarse de manera fluida y satura el computador de control de vuelo.

Durante una prueba realizada por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), un piloto descubrió un retraso al ejecutar un paso crucial para estabilizar el avión. Al finalizar la simulación, el personal de la FAA determinó que no fue posible seguir de manera rápida y sencilla el procedimiento de emergencia de Boeing para retomar el control del avión.

En su momento, The New York Times reportó que el problema está relacionado a la velocidad del procesador que se encuentra en el computador de control de vuelo (FCC). El fallo del Boeing 737 MAX está ligado al sistema MCAS, encargado de evitar la entrada en pérdida del avión, y la actualización de software que lo corrige, satura uno de los dos chips que controlan la aeronave.

Boeing utiliza un procesador de los ochenta

De acuerdo con Moon of Alabama (vía @eduardelatorre), el computador de control de vuelo del Boeing 737 MAX cuenta con dos CPUs que operan de manera independiente. Estos procesadores son modelos Intel 80286 con una velocidad máxima de 8 MHz, comercializados entre 1982 y 1991.

Peter Lemme, quien trabajó como ingeniero de control de vuelo en Boeing, señaló que el computador del avión ejecuta hasta 11 instrucciones diferentes. El diseño del software sigue un proceso muy estricto que involucra el uso de herramientas especiales y un alto nivel de optimización.

A pesar de eso, y de que otros fabricantes han producido chips similares que alcanzan los 25 MHz, el computador parece estar al límite y la actualización al MCAS termina sobrecargándolo, poniendo en peligro la ejecución de otras instrucciones en la aeronave.

¿Por qué no le instalan un chip nuevo?

Boeing 737 MAX

Los procesadores que controlan los computadores de vuelo tienen un tiempo de vida distinto al de los que se encuentran en nuestros equipos de sobremesa o dispositivos móviles. En un avión, un procesador no se mide en términos de poderío, sino en confiabilidad y los Intel 80286 son libres de errores.

Los aviones utilizan el Fly-by-Wire (FBW), un sistema adoptado por las aerolíneas comerciales durante los ochenta en el que se reemplazan los controles de vuelo manuales con una interfaz electrónica que funciona con ayuda de un computador.

El mandos de la cabina son convertidos en señales que se transmiten por cables y el computador de control de vuelo determina cómo se mueve el actuador de cada una de las superficies de control para proporcionar la respuesta adecuada.

El software se programa para el hardware, por lo que cambiar el chip por otro no es algo tan sencillo. Los programas que se ejecutan en el computador van ligados al chip por un número de parte. Boeing no puede simplemente cambiar el procesador por uno de última generación, ya que hay procedimientos estrictos que deben seguirse.

Si Boeing quisiera reemplazar un componente del hardware, tendría que pagar por una nueva certificación, realizar pruebas que involucran cientos de horas y recibir el visto bueno de las autoridades — en este caso la FAA — con una certificación que le permita poner sus aviones en el aire.

En contraste, tiempo y dinero son dos conceptos que las aerolíneas de hoy en día no pueden sacrificar.