Tras varios meses de retrasos e incertidumbre, Samsung ha lanzado un comunicado en el que confirma la vuelta al mercado del Galaxy Fold para Septiembre de este año. Hay que recordar que este modelo se presentó en Febrero al público junto con los Galaxy S10 y Galaxy S10 Plus, pero fue retirado del mercado a los diversos problema relacionados con la bisagra y la pantalla.
Probamos el Samsung Galaxy Fold: una pizca de futuro con algunos compromisos
La solución a los problemas del Galaxy Fold, siete meses después de su presentación
Los problemas del Fold comenzaron cuando la marca coreana recibió reportes de varios periodistas e influencers en los que se se encontraron con problemas con la pantalla. Esta dejaba de funcionar si se retiraba un panel protector que parecía simplemente un plástico colocado para proteger la pantalla de arañazos, pero en realidad es una parte esencial del terminal. En otros casos, aparecían bultos bajo la pantalla tras introducirse partículas de polvo por uno de los pliegues.
Samsung pide a periodistas e ‘influencers’ que devuelvan sus Galaxy Fold
Lógicamente esto provocó el retraso del terminal , pero ahora con el nuevo comunicado, Samsung ha confirmado los cambios que ha recibido el Fold en estos meses de desarrollo:
- La capa protectora de la pantalla Infinity Flex Display, que se ha extendido más allá del bisel, haciendo evidente que es una parte integral de la estructura de la pantalla y que no se debe retirar.
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El renovado Galaxy Fold incorpora refuerzos adicionales para una mejor protección del dispositivo ante partículas externas, manteniendo intacta su experiencia flexible característica.
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La parte superior e inferior de la bisagra han sido reforzadas con nuevas tapas de protección.
- Se han incorporado capas metálicas adicionales bajo la pantalla Infinity Flex Display, para reforzar la protección de la misma.
El espacio entre la bisagra y el cuerpo de Galaxy Fold ha sido reducido.
Mejoras a nivel de software para la adaptación de aplicaciones tradicionales a las pantallas del Fold.
Los cambios a un nivel visual pasan relativamente desapercibidos, aunque si nos fijamos en su parte superior, el nuevo pliegue –abajo– viene mejor protegido y por tanto es ahora más resistente frente a la penetración de pequeñas partículas.