14 de enero de 2020. Es la fecha que marca Microsoft como fin del soporte extendido de Windows 7. Salió a la venta en 2009, tuvo muy buena acogida entre la crítica y los usuarios y aunque su soporte oficial por parte de Microsoft finalizó en 2015, todavía funcionaba el llamado soporte extendido.

Si eres usuario de Linux o macOS, este tema te dará igual. Si eres usuario de Windows 10, no estaría de más que tuvieras en mente que tarde o temprano te ocurrirá lo mismo que a los usuarios de Windows 7, y si eres parte del 37% de usuarios de Windows con Windows 7, en ese caso deberías tener en mente este fin de soporte extendido y qué implica.

Pero antes hay que preguntarse por qué tras diez años en el mercado, Windows 7 sigue presente en el 30% de computadoras con Windows a pesar de las sucesivas actualizaciones de Windows 8, 8.1 y 10.

El porqué del éxito de Windows 7

Si eres usuario de Windows 7 tendrás tus motivos para seguir con esta versión de Windows a pesar de haber recibido en varias ocasiones un mensaje de Microsoft invitándote a dar el salto a Windows 10.

En primer lugar, Windows 7 es un sistema robusto y estable, a pesar de los años. Además, su consumo de recursos es relativamente bajo, incluso cuando apareció en 2009: 1 GHz de CPU, 1 GB de RAM y 16 GB de disco. Windows 10 sólo cambiaba estos requisitos en la CPU, exigiendo el doble de gigaherzios y características avanzadas como PAE, NX y SSE2 que no tenían todos los microprocesadores activos en 2015, cuando Windows 10 salió al mercado.

Y hay que tener en cuenta que no es lo mismo renovar tu computadora doméstica que hacerlo con el parque de ordenadores de una oficina o de un entorno de producción computerizado.

Más razones para mantener Windows 7. Los inicios de Windows 10 no fueron muy alentadores porque Microsoft priorizó los elementos táctiles de Windows a la versión de escritorio de toda la vida. Si tenías una computadora con pantalla táctil, Windows 10 era un gran cambio, si trabajabas con Windows en un PC al uso, suponía un quebradero de cabeza. Este aspecto se solventó con actualizaciones, pero el daño ya estaba hecho.

Pero hay más. Volviendo a los entornos de producción computerizados, hay empresas que dependen de software interno diseñado para una tarea específica en una versión concreta de Windows. Pasar de Windows 7 a Windows 10 implicaría volver a diseñar ese software, cuyo coste puede ser muy elevado a diferencia de los programas estándar.

Como remate, Windows 10 está pensado para funcionar con conexión permanente a internet, algo que no siempre es posible para todo el mundo. Windows 7, en cambio, es menos dependiente de conexiones a la red. Además, para quienes desconfían del uso de nuestros datos que hace Microsoft, Windows 7 es más controlable que Windows 10.

¿Qué hacer si Windows 7 se queda sin soporte?

Que Windows 7 se quede sin soporte no significa que vaya a desinstalarse o que deje de funcionar por su cuenta.

Microsoft asigna a sus sistemas operativos un ciclo de vida. Desde su lanzamiento, la versión más reciente de Windows cuenta con soporte estándar por parte de Microsoft durante al menos cinco años, lo que significa recibir actualizaciones y parches gratuitos, así como mejoras, nuevas funciones, soporte para nuevo hardware o software, etc.

Tras esos primeros cinco años de soporte estándar, que en Windows 7 finalizó en 2015, empieza la fase de soporte extendido, que en Windows 7 finalizará en 2020. En esta fase, Windows sigue recibiendo actualizaciones de seguridad, pero nada más. Ni nuevas funciones, ni compatibilidad para nuevas tecnologías o componentes.

Esto es así a nivel oficial, de Microsoft, pero tiene sus consecuencias en el mercado, y es que si el responsable de Windows 7 ya no le presta atención, es lógico que el resto de fabricantes de hardware y software también lo hagan. Es decir, en la actualidad ya es habitual que determinado software o hardware no se lleve del todo bien con Windows 7. De ahora en adelante, esta incompatibilidad será cada vez mayor.

Obviamente, el principal consejo es que actualices Windows 7 a Windows 10, pero en caso que no puedas hacerlo, tienes varias opciones. En primer lugar, aislar lo máximo posible tu computadora con Windows 7 del acceso a fuentes externas, en especial internet pero también memorias o discos externos.

Windows 7 dejará de recibir actualizaciones de seguridad, por lo que será menos seguro que versiones más actuales. Esto implica que debemos exponerlo lo menos posible a la red y a la entrada de archivos. Por otro lado, no está de más contar con un buen cortafuegos, ya sea el que viene por defecto o acudir a uno externo.

Por otro lado, aunque no haya actualizaciones para Windows 7, es posible que sí las haya para el resto de programas que tengas instalados. Procura tenerlos al día para evitar problemas de seguridad.

Por lo demás, el fin del soporte extendido de Windows 7 no afecta al funcionamiento diario de tu computadora. Simplemente dejará de estar en mente de fabricantes y desarrolladores. Con todo, según el uso que hagas te seguirá siendo útil durante varios años más.

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: