Google sabe que China es un territorio muy importante de donde puede sacar provecho, por ello en 2017 comenzaron a trabajar en un buscador que respetara las estrictas restricciones impuestas por el gobierno de aquel país, incluyendo todos los temas relacionados con la censura de información. El proyecto lleva por nombre Dragonfly y hasta el momento sigue siendo un prototipo que está al alcance de muy pocos por medio de una aplicación en Android.
Google planea volver a China casi una década después con un buscador plagado de censura
Dragonfly ha desatado la polémica alrededor de los de Mountain View, pues tanto empleados de la compañía como políticos estadounidenses han mostrado su preocupación por los movimientos de Google con su nueva propuesta. Parece que la controversia está lejos de terminar, pues ahora el portal The Intercept ha revelado que el buscador estará ligado a los números de teléfono de los usuarios.
¿Por qué motivo? Para que el gobierno chino pueda rastrear todas las búsquedas que realizan las personas y saber exactamente lo que están viendo en internet. La fuente también menciona que Google habría agregado una lista negra de palabras para evitar que los usuarios obtengan información relacionada con los "derechos humanos", "protesta estudiantil" y "Premio Nobel", colaborando así con la censura impuesta por las autoridades asiáticas. El enlace con el número de teléfono permitiría que el gobierno identificara rápidamente a las personas que están buscando esos términos.
Preocupación en instituciones protectoras de los derechos humanos
Es precisamente la contribución directa de Google lo que más está preocupando a diversas instituciones protectoras de los derechos humanos, ya que los de Mountain View serían cómplices del daño a la privacidad y la censura, una persecución que se ha hecho muy común contra activistas políticos y periodistas de ese territorio.
Cynthia Wong, investigadora de Human Rights Watch, señaló que la situación "es un problema desde el punto de vista de la privacidad, ya que permitiría un seguimiento y un perfil mucho más detallado del comportamiento de las personas". Además, agregó:
Vincular las búsquedas a un número de teléfono dificultaría mucho más que la gente evite la vigilancia gubernamental, que es excesiva y generalizada en China.
Mostrando información meteorológica alterada
Google no trabaja sola con Dragonfly, tiene el apoyo de Joint Venture, una compañía que estaría encargada de actualizar constantemente la lista negra de términos que se quieren censurar. Para finalizar las polémicas características del buscador, también sería capaz de mostrar información meteorológica alterada por una fuente proveniente de Beijing, la cual no ha podido ser identificada. Lo anterior evitaría que la población supiera datos reales como el grado de contaminación del aire. No sería la primera vez que las autoridades de China manipulan este tipo de información.
Empleados y senadores presionan a Google por su polémico buscador para China
Google no quiere hablar del tema, ni con sus empleados
La compañía dirigida por Sundar Pichai nuevamente se ha negado a emitir declaraciones sobre el informe publicado por The Intercept. Si bien el buscador todavía se encuentra en etapas de desarrollo, no sabemos si Google terminará desistiendo por la gran cantidad de críticas a su alrededor, pero claramente la imagen de la empresa ha quedado dañada con esta información.
A principios del mes anterior te contamos que empleados de Google estaban en desacuerdo con la forma en que estaba actuando la compañía, ya que habían retirado el acceso a los documentos confidenciales relacionados con el proyecto. Según The Intercept, de los 88.000 empleados solo un 0.35% habían sido informados sobre Dragonfly.