Apple lanzará un "iPhone barato" de 6,1 pulgadas con pantalla LCD, sin bordes, con Face ID y carga inalámbrica a un precio significativamente menor que los 999 dólares o 1059 euros del iPhone X. Según Trendforce, este costará entre 699 y 749 dólares.
El objetivo es lograr altas ventas con un smartphone que tenga la misma forma que el iPhone X (notch, pantalla completa, sin botón de inicio) pero a un precio significativamente menor. De acuerdo a varios reportes y rumores, Apple lograría reducir el costo del teléfono, sin perder márgenes, fabricándolo con pantalla LCD en vez de OLED y un material similar al iPhone 8 en la parte trasera. De ser un éxito, el "iPhone barato" sería clave para el aumento en la cuota de mercado del dispositivo.
El «iPhone X barato» podría tener la misma pantalla LCD que el LG G7 ThinQ
Del informe:
El iPhone LCD de 6,1 pulgadas sería posicionado como el dispositivo más importante en la estrategia de 2018 para venta de smartphones, dedicando el 50% de la producción a este dispositivo. Apple tendrá que modificar precios para ajustarse a las expectativas del mercado y expandir su cuota. Considerando la reducción de los componentes necesarios para fabricar la versión LCD, el costo será de entre 699 y 749 dólares.
Según Trendforce, el costo de la nueva versión del iPhone X será de entre 899 a 949 dólares, haciendo más atractivo el nuevo, al menos desde un punto de vista económico. El iPhone X de 6,5 pulgadas costaría al menos 999 dólares y se intentará alinear con consumidores profesionales y de negocios.
El reporte es coherente con otros publicados semanas atrás, como el de RBC Capital Markets que calculaba que el precio de la segunda generación del iPhone X será 899 dólares, es decir 100 dólares menos que la versión actual.
De acuerdo a la firma inversora, el volumen de producción de los tres nuevos modelos del iPhone será de entre 83 y 88 millones de unidades, incrementando aún más los ingresos por smartphones de la compañía, en comparación a 2017.
El informe también menciona presiones por parte de Apple hacia sus proveedores para reducir costos de fabricación y de esa forma ser más competitivos con mejores precios para la oferta de smartphones de 2018.
El problema del OLED para el próximo iPhone
