En más de una ocasión, tras ver una película o serie de animación, ya sea de Disney, de artistas japoneses como Hayao Miyazaki, de estudios tan ilustres como Production I.G. (Ghost in the Shell, Patlabor, Blood, Evangelion…) o incluso de canales de televisión especializados en cartoons como Nickelodeon o Cartoon Network, me he preguntado qué herramientas utilizan y cómo se las ingenian para dar vida a dibujos inanimados y que, en algunos casos, parezcan reales.
Los magos no desvelan sus trucos, pero en ocasiones tenemos la suerte de ver reportajes o documentales que nos desvelan algunas de las técnicas de animación.
Un ejemplo es este vídeo de Disney de 1938 extraído del cortometraje How Walt Disney Cartoons Are Made (Cómo se hacen los dibujos animados de Walt Disney) o el clásico zootropo que habrás visto en un museo o documental y que, moviendo figuras estáticas a gran velocidad, da sensación de movimiento.
Volviendo al presente, artistas como Miyazaki y su Studio Ghibli han decidido compartir sus herramientas, como es el caso del software Opentoonz, disponible para cualquier animador o aprendiz de animador.
Y es que elegir una herramienta para animar no es fácil, pero por suerte nos encontramos con soluciones para todos los públicos y nivel de aptitudes, como Pencil2D, una herramienta de animación tradicional disponible de manera libre y gratuita.
Simplificando mucho, con Pencil2D podemos convertir nuestra habitación en un estudio de animación. Con una computadora normal y corriente, algo de paciencia y muchas ganas de aprender y dibujar. No necesitas más, aunque un lápiz óptico te será muy útil.
Manos a la obra
Crear una animación no requiere de grandes presupuestos o de un equipo con decenas de dibujantes. Está claro que ayuda, y mucho, pero si queremos aprender animación o llevar a cabo nuestro propio corto animado, sólo necesitamos tiempo y dedicación.
Pencil2D nos permite cubrir todos los aspectos técnicos, que antaño estaban al alcance de unos pocos pero que con soluciones como ésta nos facilita la tarea de animar desde casa partiendo de los mismos principios de toda la vida.
En primer lugar, una paleta de herramientas para dibujar, borrar y colorear con paneles complementarios para afinar el lápiz, cambiar el grosor del trazo y seleccionar un color concreto, bien con la paleta de colores o con una rueda de color o círculo cromático.
El segundo elemento con el que vamos a trabajar más es el que da movimiento al dibujo, la línea de tiempo. Ahí podemos añadir o quitar capas para jugar con los elementos que dibujaremos y a los que dotaremos de movimiento frame a frame, o como indica Pencil2D, key a key. Como es habitual, es posible crear, quitar o copiar frames.
A medida que dibujamos cada fotograma podemos iniciar la reproducción para ver si la transición es buena y el movimiento resulta natural.
Las capas de la línea de tiempo pueden ser Bitmap o Vector para colocar los objetos o personajes editables, los que vamos a animar. Además, con la capa Camera podremos jugar con imágenes prediseñadas de gran tamaño, normalmente fondos, para así dar sensación de movimiento, como por ejemplo, en una panorámica.
Finalmente, la capa de audio Sound sirve para acompañar la animación con su propia banda sonora. Y como podemos crear varias capas, es posible organizarnos mejor. En el caso del sonido, por ejemplo, podemos crear una capa para la banda sonora, otra para voces y una tercera para efectos de sonido.
Para facilitarnos la tarea, Pencil2D incluye la opción de importar imágenes en formato PNG, BMP, JPG, GIF o TIF así como audio en WAV y MP3.
También podemos importar fotogramas que hayamos creado previamente desde File > Import > Image Sequence. Si hay varios, la aplicación los traducirá en frames separados, ahorrándonos así el trabajo de hacerlo manualmente.
En cuanto a exportar, podemos extraer fotogramas por separado, una serie de fotogramas o, directamente, la animación en formato MP4. En este sentido, permite elegir qué secuencia de frames incluir y la resolución final del vídeo.
Menos es más
Pencil2D está diseñado para ser lo más simple posible. Sin embargo, nos permite hacer todo lo necesario para animar garabatos o una imagen dibujada con otra herramienta.
Y entre otras cosas, se lleva bien con los lápices ópticos, detectando incluso la presión, de manera que podemos dibujar directamente en vez de importar los dibujos.
Si comparamos Pencil2D con Opentoonz, de la que hablé [en un artículo anterior](artistas como Miyazaki y su Studio Ghibli), por prestaciones nos quedaremos con la segunda opción, ya que Opentoonz es más completa y permite aplicar efectos y automatismos que el usuario medio o avanzado echarán de menos en Pencil2D.
De ahí que haga hincapié en que Pencil2D está pensada para iniciarse en la animación y para crear animaciones tradicionales artesanales.
Con todo, Pencil2D ofrece una selección de tutoriales en vídeo en varios idiomas, entre los que caben destacar los disponibles en español en YouTube.