¿Quién no está preparado y deseoso por disfrutar de la segunda temporada de Stranger Things? Mientras contamos los minutos que faltan para poder seguir la aventura del pequeño grupito de Hawkins, tenemos mucho de lo que hablar. ¿Recordáis al demogorgon? ¿Y qué hay de los insidiosos zarcillos negros? ¿Por qué le aparece a la pobre Bárbara una babosa por la boca? La biología de Stranger Things es tan extraña como su título indica. Discutamos lo que sabemos sobre algunos de los monstruos más carismáticos de las series actuales.
Las larvas
Es muy, muy difícil entender la biología de Stranger Things porque, sinceramente, los creadores han querido hacer un batiburrillo muy extraño. Algo que es bueno porque el resultado es brutalmente ajeno a este mundo, lo que resulta perturbador y sugerente. Eso mismo ocurre con las "babosas" que surgen de la boca de las pobres víctimas del demogorgon. Babosas que en realidad deberían de ser larvas, atendiendo a lo que podemos deducir de su vida.
Estas larvas realmente se parecen muchísimo a los gasterópodos, un tipo de moluscos como las... ejem, babosas. O a los poliquetos, gusanos bastante complejos anatómicamente hablando. En cualquiera de los dos casos, sólo debería ser un parecido, pues podemos enlazar su aparición con los zarcillos, que parece el ser maduro de esta especie de pesadilla que protagoniza la serie. Así, podemos deducir que las larvas son sólo miembros inmaduros o, peor aún, una especie de espora móvil y muy desagradable que dará lugar a un horror mayor.
El demogorgon
Diseccionemos al verdadero protagonista de este carnaval de monstruos, denominado por los chicos como demogorgon, la demogorgona, por su relación con uno de los villanos más característicos de D&D. Es un depredador con cierta forma humanoide. Su cabeza se abre en cuatro pétalos erizados de dientes irregulares. A diferencia de la "no-cara" el resto del cuerpo es relativamente común: cuatro extremidades, cinco dedos en las superiores, como muchos mamíferos; tres o cuatro en las inferiores (que podrían ser cinco con un dedo vestigial). Los antebrazos del monstruo, ciertamente, parecen más largos, proporcionalmente hablando, pero tienen el número de articulaciones que se espera de un humanoide.
Un detalle importante es la poderosa musculatura que posee, sin grasa, muy tersa y capaz de atravesar paredes. Esto, en la mente de Mark Steger, que interpreta al demogorgon, es una señal del origen extraño, con una gravedad muy distinta a la de la Tierra. Pero volvamos a lo interesante. En realidad, el monstruo, tal y como explican sus creadores, proviene de otro lugar aún más inquietante: otra dimensión. Según explican, en su conceptualización este ser es como una especie de mezcla entre los seres de Clive Barker (escritor y creador de Hellraiser), Aliens y The Thing, de Carpenter, con un comportamiento parecido al de tiburón.
Nadando en las procelosas aguas de fantasía de Stranger Things, podríamos decir que el demogorgon acecha como lo haría el escualo de Spielberg. Pero en vez de las aguas, su superficie es nuestra dimensión, mientras que las profundidades son el mundo Upside-down. Una vez que huele la sangre, literalmente, atraviesa esa capa que divide ambos mundos, creando una "herida" dimensional por la que se puede atravesar (y que emplean los protagonistas de la serie). Como si fuera agua, poco a poco, la "herida" se cierra, volviendo a la calma y cerrando el paso a las especies ajenas a esta capacidad.
Está claro que el demogorgon es capaz de comer, ya que se alimenta de las víctimas que mata, pero antes las arrastra hacia los zarcillos con algún propósito indescifrable. También se ha visto al monstruo alimentarse de otras cosas, como es un animal en el bosque o incluso de uno de los extraños huevos de los que hablaremos más adelante. Eso sí, en cualquier caso, este monstruo no parece tener más inteligencia que la de un depredador astuto, sin cultura ni tecnología asociada. Más parecido a una bestia que a un ser con consciencia.
Los zarcillos
Vayamos con la cuestión verdaderamente interesante: el monstruo más horripilante. El que llena todo el espacio del Upside-down no es el demogorgon, es el creep al más puro estilo Zerg, la superficie musgosa o gelatinosa que lo invade todo. Este parece el ser vivo omnipresente en toda la dimensión. Y también parece reinar sobre todo, incluyendo el demogorgon. El monstruo lleva a sus víctimas hasta esta superficie con intenciones de dejar que uno de sus zarcillos penetre en el interior de los cuerpos.
Está claro que esta "violación" termina en la creación de las larvas, aunque no sabemos qué ocurre después ni cómo. Esta sustancia se parece, ciertamente, a un hongo. Los hongos están mucho más cerca de los animales que, incluso, las plantas. Existen hongos capaces de comportamientos muy complejos para algo sésil. En nuestro conocimiento constan organismos con resortes, con estructuras especializadas en la parasitación... ¿por qué no pensar en una especie de súper hongo muy evolucionado?
Si este fuera el caso, podríamos imaginar a los zarcillos negros como el verdadero monstruo de Stranger Things y no el demogorgon, que sería solamente una manifestación del organismo maduro. En tal caso, las larvas podrían ser esporas (un homólogo de las mitosporas vegetales pero en una deformada versión de reproducción pseudosexual); o esta especie de súper esporas podrían ser, precisamente, el demogorgon, que no sería otra cosa que una estructura hiperespecializada en la reproducción de su versión madura: el hongo. Otros organismos a los que se parece esta sustancia son los mohos y líquenes, así como algunas bacterias gigantes, pero no son tan complejos.
Más piezas del puzle
Por si todo esto fuera poco, la biología de Stranger Things tiene aún más piezas de las que nos gustaría contar. Aunque bien mirado no podrán ayudar a esclarecer el asunto. Por ejemplo, el huevo: ¿de dónde viene, y qué ha salido de él? En un momento dado, el demogorgon parece estar alimentándose del mismo ¿pertenece a un retoño de su misma especie? Una posibilidad es que estos huevos sean la "evolución" (no en el sentido estricto biológico) de las larvas, que podrían formar una pupalia para terminar por madurar en un imago, como una verdadera larva. ¿Qué bicho saldría? ¿Tal vez un demogorgon? ¿Otra cosa completamente distinta? Ni idea.
Otra opción es que los huevos los haya puesto otra criatura. En tal caso, no hemos visto qué tipo de ser es, pero no parece que tenga nada que ver con el monstruo. Otra cuestión interesante es la especie de ceniza que inunda Upside-down. ¿Y si fueran esporas? Esporas pero más normalitas, se entiende. Una manera del "hongo" de reproducirse de manera asexual y extenderse por todos lados. Eso tendría bastante sentido. Ya para terminar, tenemos otro bicho del que hablar, presente en los trailer de la segunda temporada de Stranger Things.
Este enorme ser tiene varias "patas" o tentáculos y se eleva muchos metros por encima de la superficie terrestre. Pero también parece tener cabeza, sin rasgos aparentes, e inteligencia, por lo poco que muestran los trailers. Este nuevo ser podría ser la manifestación final del hongo que lo infecta todo en Upside-down, pero al más puro estilo de Cthulhu. Por si todo esto fuera poco, hay que decir que en los guiones había una araña saliendo de la boca de la pobre Bárbara y no una larva, en un principio, lo que habría complicado las cosas mucho más.
Por el momento, tendremos que seguir a la espera para poder hacernos una mejor idea de qué une a todos estos seres extraños de un mundo cada vez más rico y cruel que supone la sombra llamada Upside-down. ¿Cómo afectarán estos seres a los protagonistas, especialmente a Will? **¿Son todos de la misma especie, en distintos estadios, o estamos viendo a diferentes seres? ¿Qué papel juegan las habilidades psíquicas y todo lo referente a los metahumanos como Eleven? Bueno, tranquilos. Todo esto, y mucho más, podremos ir descubriéndolo en breve.