Tendencias sobre ventas de coches electricos en Noruega que veremos en más paises

Los planes de China para decir adiós a los vehículos de diésel y gasolina van tomando cada vez más forma. Después de que el Gobierno afirmara que está preparando el fin de los vehículos de combustión en el país, el Ministerio de Industria y Tecnología ha anunciado una nueva normativa que obliga a los fabricantes de automóviles a tener una cuota de venta del 10% de los vehículos autónomos o híbridos a partir de 2019. El porcentaje se elevará a un 12% un año después de 2020.

China ya planea su adiós a los vehículos diésel y gasolina

La medida se establecerá para las compañías que fabriquen o importen anualmente más de 30.000 vehículos de combustión en su mercado más grande a nivel mundial. Si los fabricantes no cumplen con la cuota mínima de producción de automóviles eléctricos o híbridos, China podrá imponer las multas correspondientes.

La normativa es el primer paso que ha tomado el país para poner freno a la producción de coches diésel y gasolina en uno de los países con mayor contaminación del mundo y da tiempo a los fabricantes de automóviles para que se preparen ante una prohibición absoluta de los vehículos de combustión.

El fabricante Honda afirmó que trabajará para alcanzar el crédito impuesto por China, afirmó un portavoz de la compañía para Bloomberg, después de que la compañía anunciara que pondrá a la venta su propio vehículo eléctrico en el gigante asiático durante el próximo año. Por su parte, General Motors Co. dijo que estos esfuerzos entre el Gobierno y las empresas son "esenciales" para generar la aceptación de los coches eléctricos e híbridos por parte de los consumidores. BMW y Volkswagen también han anunciado su apoyo a esta nueva incitativa.

China pretende que los grandes fabricantes de automóviles fomenten la producción de los vehículos verdes en el país, dentro del objetivo de frenar las emisiones de carbono para 2030 y así mejorar los altos niveles de contaminación.

Sin embargo, el país deberá afrontar varios retos para conseguir su objetivo, como la alimentación de los aproximadamente 200 millones de vehículos que circulan en las calles y la estrategia para afrontar la posible pérdida de ingresos por las importaciones de petróleo.

Además de China, Francia y Reino Unido han sido los países que han presentado sus planes para reducir las emisiones por los automóviles de combustión en las ciudades.

Francia dice adiós a los vehículos diesel y gasolina