Tras lanzar varios auriculares inalámbricos y entrar de lleno en la guerra por integrarlos con deporte con los Samsung Gear IconX, capaces de medir el ritmo cardíaco y la distancia recorrida, Samsung ha lanzado su segunda versión, los Samsung Gear IconX 2018. Todo lo que caracterizaba a la primera generación está presente en la segunda, como son las funciones mencionadas o la capacidad de reproducir canciones y archivos de audio descargadas de forma independiente al smartphone gracias a 4 GB de memoria interna.

Uno de los aspectos más criticados de la anterior generación, la batería, crece de 47 mAh a 82 mAh por cada auricular, en un diseño que como vemos en las imágenes, los hace totalmente independientes entre sí, frente a otros modelos que aún van unidos por cable. La batería de la funda, que sirve para proporcionar una carga extra en desplazamientos, es de 340 mAh, un ligero incremento de 25 mAh respecto a la primera generación. Esto hace que pese a que la caja y los auriculares sean más pequeños, pesen algo más, 54.5 y 8 gramos respectivamente.

Así, según Samgung, el tiempo de reproducción será de hasta 7 horas cuando reproduzca canciones almacenadas en la memoria interna y de hasta 5 horas cuando se conecte por Bluetooth, con un tiempo de habla de hasta 4 horas. Sobre el papel, no parecen sorprendentes, pero tampoco hay espacio para mucho más. Sin embargo, las cifras doblan o triplican a las del modelo anterior, que por ejemplo en reproducción de la memoria se quedaba en 3,8 horas y con Bluetooth en 1,6 horas.

Como ocurre con la mayoría de wearebles de los surcoreanos, los Samsung Gear IconX 2018 son compatibles con todos los dispositivos Android que cuenten con la versión 4.4 Kit Kat y 1.5 GB de RAM o superior. En dispositivos Samsung con Bixby habilitado (en España ya está disponible en inglés y en coreano), es decir, los Samsung Galaxy S8 y el Galaxy Note 8, el usuario podrá invocar al asistente y hacer uso de sus nuevas funcionalidades.

Otra cosa que se repite es el control táctil, algo en lo que la primera versión resultó un acierto. La curva de aprendizaje es pequeña y mediante pulsaciones largas, cortas, dobles o triples es posible accionar reproducción o pausa, pero también indicar que deseamos iniciar un entrenamiento, aunque por defecto los monitoriza automáticamente.

Para aportar mayor coherencia con el resto de dispositivos de la compañía, la caja de los Gear IconX 2018 pasa de microUSB a USB-C con USB 2.0, que es el protocolo de transferencia que se empleará para copiar canciones desde el ordenador. En cuanto a conectividad inalámbrica, llegan con Bluetooth 4.2. Parece que habrá que esperar para ver Bluetooth 5.0 aquí.

Los Samsung Gear IconX 2018 llegarán en negro, gris y rosa en una fecha y a un precio aún por especificar, aunque su precio no debería estar lejos de los 199€ del modelo anterior.