Esta semana WikiLeaks está, otra vez, en el punto de mira. Tras la liberación de Chelsea Manning, la ex analista del Ejército norteamericano que filtró miles de documentos clasificados a WikiLeaks y que logró una reducción en su sentencia gracias a que fue conmutada por Barack Obama; y que la Fiscalía sueca ha archivado la acusación de violación sobre Assange formalmente, después de llevar desde 2010 abierta —aunque sin muchos cambios para él dado va a seguir recluido en la embajada de Ecuador en Londres por lo que parece— , el mundo vuelve a recordar qué es WikiLeaks, si es que alguna vez lo ha olvidado, y quién es Assange, si es que no se ha interesado ya.
Con motivo de esto, te traemos una recopilación de documentales que te ayudarán a conocer mejor a la persona tras el activista que aboga por la libertad de la información. Se complementa con esta cronología de su caso legal que ya sacamos anteriormente.
Underground: The Julian Assange story (2012)
La película narra lo ocurrido durante la adolescencia de Julian Assange. Está basada en la obra de Suelette Dreyfus Underground, publicada en 1997 —sobre todo los sucesos narrados en el final del capítulo 7, y los capítulos 8 y 9 del libro—. Por cierto, se puede leer online o descargar de forma totalmente gratuita en inglés.
Pues bien, como decíamos, este documental se basa en la etapa más primeriza de Assange y presenta básicamente la historia de sus años de formación como hacker adolescente.
En los años ochenta, en Australia, Julian Assange era solo un joven que, junto a su hermano y su madre, vivía escondido de un padrastro violento. Al convertirse en uno de los primeros hackers de la historia, comienza a tener acceso a sitios peligrosos y de niveles muy altos relativamente fácilmente, lo que capta la atención de la policía. Pero no es hasta que se mete en una base de datos del Pentágono, cuando comienza a ser entendido como un auténtico peligro para la seguridad nacional.
El punto de empezar por aquí es que, se quiera o no, el pasado configura a la persona; aunque también es injusto juzgar el presente por el pasado. De todas formas, ya que vamos a conocer al personaje, hagámoslo desde el principio: antes de ser activista, iconoclasta e informante polémico, Assange fue un hacker más, con el típico interés por ver cosas prohibidas y retarse a sí mismo. Además, como a casi todos los adolescentes, le gustaba meterse en problemas y retar a la autoridad, solo que contó con más poder para hacerlo.
We steal secrets: The Story of WikiLeaks (2013)
Damos un salto en los años. La película trata ya de pleno a la organización WikiLeaks iniciada por Julian Assange, tanto su creación como auge, y relata los destapes más importantes acontecidos. Abarca un período de varias décadas e incluye considerable material de referencia sobre las personas que participaron en la recopilación y distribución de información y no solo del susodicho, pero sí que se centra en él.
El documental se ciñe bastante a los datos prácticos que se tienen de cada caso y cómo la organización llegó a ser tan infinitamente tortuosa para las autoridades. De hecho, aunque trata de ser justa e imparcial, se diría que conserva cierto tinte anti-Assange.
Basándose en el testimonio de más de 20 testigos y entrevistas grabadas previamente de los que no quisieron o pudieron participar —como Assange o Manning por razones obvias—, la película crea una imagen muy completa del complejo mundo de las comunicaciones por Internet, los servicios de inteligencia y la red de conexiones de secretos; levantando o cuanto menos dejando pendientes bastantes cuestiones morales y éticas.
Julian Assange - A Modern Day Hero?
La verdad, opino que sobra el signo de interrogación en el título, pues en realidad el director ya ha decidido lo que piensa de Assange —sea quien sea el director, pues no está acreditado—. No hay nada de malo, por supuesto, en hacer una obra que apoye activamente a esta figura, pero podrían haberlo dejado claro desde el principio.
En cuanto al contenido, consta de aproximadamente tres horas de material prácticamente sin editar, destinado a proporcionar al público un retrato de Julian Assange “sin censura”. El problema de esto es que a veces parece que el mensaje se repite; normal dado que aún en entrevistas distintas un personaje no cambia su mensaje ni su versión. También se puede sentir como poco pulido —algo antiguo o casero— precisamente por la intención de la producción de editar lo menos posible el material original.
No es una película que se vea por su entretenimiento, lo pongo aquí por su valor archivístico y, válgase la redundancia, documental. En lugar de ver todas las entrevistas que se le han hecho, se puede tirar por ver estas tres horas de seguido y ya no se necesitará ver más porque muy probablemente no hay más apariciones suyas en vídeo. De todas formas, hay verdaderos momentos de brillantez en los que no se puede dejar de tratar de empatizar con él por lo revolucionario y carismático del discurso y se puede llegar a disfrutar mucho.