Cabify tiene una larga lista de propósitos de año nuevo y, en los dos meses que llevamos de 2017, ya ha tachado algunas cosas de la lista. La empresa de transporte privado se ha tomado muy en serio lo de Año nuevo, vida nueva y ha estrenado nueva imagen.

El logo de Cabify es, a partir de este jueves 9 de febrero, de color morado, escogido por la mezcla entre el azul y el rojo. "El azul por la estabilidad y la calidad de Cabify y el rojo por la pasión con la que trabajamos", explica para Hipertextual Ricardo Weder, General Manager de la empresa en América Latina.

El cambio de piel ha sido la forma de conectar de una manera diferente con los usuarios, más informal e irreverente según Weber, y muestra la evolución de la empresa desde que se fundó en Madrid en 2011.

México fue el segundo país al que llegó Cabify, donde opera en Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Puebla, Querétaro, Toluca, León, Mérida, Aguascalientes y Tijuana.

El potencial de mercado en la República ha provocado que Cabify no quiera ser una empresa más, sino convertirse en la líder en transporte privado en México. Para ello, van a invertir 50 millones de dólares en el país, además de generar 200.000 oportunidades de empleo a lo largo de 2017.

Para Cabify, México no es solamente un país donde ampliar su mercado, sino también el lugar en el que pueden comprometerse políticamente. Después de la victoria presidencial de Donald Trump en Estados Unidos, las deportaciones a los mexicanos indocumentados esperan ser masivas. Los primeros migrantes deportados llegaron al aeropuerto de la Ciudad de México el pasado martes 7 de febrero. Pero, según parece, estos serán los primeros de muchos.

Por ello, la empresa fundada en España ha querido su apoyo al país presidido por Enrique Peña Nieto ante los desafíos políticos que enfrenta la región, y han empezado los trámites para contratar a los deportados que lleguen de Estados Unidos.

La iniciativa, todavía en fase piloto, se centrará al principio únicamente en México, donde los recién llegados obtendrán facilidades para trabajar como choferes en la red de transporte privado. Ricardo Weder destaca:

Estamos tratado con instituciones para ver cómo podemos agilizar el proceso de documentación y papeles de los repatriados para que se capaciten y puedan trabajar con nosotros. Los que tengan acceso a un automóvil podrán trabajar como choferes y si no les pondremos en contacto con personas que tengan carros y necesiten a alguien que los maneje.

Cedida por Cabify

El apoyo que Cabify muestra a México con este tipo de iniciativas pueden lograr que la empresa de transporte logre un mejor posición en el mercado, en el que compite con Uber. Sin embargo, Weder tiene claras cuáles son las diferencias entre ambas empresas: "Nosotros ofrecemos una propuesta de valor a nuestros usuarios para mantener relaciones a largo plazo, y también garantizamos a nuestros conductores la mejor seguridad", subraya el General Manager en entrevista con Hipertextual.

Cabify también ha empezado a luchar contra la contaminación, uno de los mayores retos de la Ciudad de México. Los planes para incorporar coches híbridos o eléctricos se está empezando a perfilar, y se están estudiando las infraestructuras para la recarga de los automóviles en diferentes ciudades.

Algunos choferes de Cabify en Madrid y Ciudad de México ya conducen coches híbridos, aunque no existe por el momento una categoría específica dentro de la aplicación.

2016 fue un buen año para Cabify: además de abrir el mercado en 25 ciudades, siete de ellas en México, la empresa consiguió más de 100.000 usuarios corporativos a nivel global. Sin embargo, la empresa española quiere que 2017 sea un año todavía mejor. Poner el foco en América Latina y comprometerse tanto económica como políticamente con el lugar donde tienen su mayor cuota de mercado, será la apuesta definitiva de Cabify durante el año 2017.