Marcharse a vivir a otro país, o sea, convertirse en un expatriado, es un fenómeno de lo más corriente desde hace ya décadas, agudizado por la globalización, que potencia la movilidad y ha acercado más a las distintas naciones del mundo. **Pero unos países son más amigables que otros con los extranjeros que cruzan sus fronteras para reconstruir su vida allí; y eso es lo que ha estudiado InterNations, que ha publicado recientemente su informe sobre este asunto, el Expat Insider de 2016**.
Los datos para el estudio han sido obtenidos mediante encuestas a los propios expatriados, más de 14.000 de 174 nacionalidades diferentes, datos que han propiciado un análisis en profundidad de cómo es su vida cotidiana, sus desplazamientos y su trabajo, como extranjeros en sesenta y siete países de todo el mundo. El informe incluye cuestiones variadas, y se centra en su grado de felicidad en los nuevos países de residencia y su vida personal en el exterior, para lo que han tenido que evaluar cuarenta y tres aspectos en una escala del uno al siete, así como en las múltiples razones por las que se marcharon de sus patrias respectivas, si bien el 35% de los encuestados aportan una motivación laboral para esto.
Según InterNations, **los países que más expatriados reciben son, por orden, Alemania, Estados Unidos, los Emiratos Árabes Unidos, Suiza, España, Francia, Reino Unido, Noruega, Arabia Saudí e Italia**, y como veis, siete de los diez son europeos. En cuanto a las nacionalidades de los expatriados, de nuevo por orden, son estadounidenses, británicos, indios, alemanes, franceses, italianos, canadienses, australianos, holandeses y filipinos; y el 81% de ellos posee una educación universitaria y una media de edad de cuarenta y tres años, pues sólo el 35% cuentan treinta y cinco años o menos.
Por otra parte, **los países en los que los extranjeros se sienten más satisfechos son, por orden, Taiwán, Malta, Ecuador, México, Nueva Zelanda, Costa Rica, Australia, Austria, Luxemburgo y la República Checa**. España se encuentra en el puesto catorce; Panamá, en el quince; Colombia, en el veinte; Chile, en el cuarenta y cinco; Perú, en el cincuenta y tres; Argentina, en el cincuenta y cuatro; y Brasil, en el sesenta y cuatro. El resto de países de Hispanoamérica no han sido contemplados en el informe, pero es significativo que tres de los diez mejores sean latinoamericanos.
En cuanto a los países que consideran con mayor calidad de vida, los diez primeros son Taiwán de nuevo, Austria, Japón, España, Costa Rica, Malta, República Checa, Singapur, Alemania y Suiza. Ecuador está en el puesto dieciocho; México, en el veintidós; Panamá, en el treinta y tres; Argentina, en el treinta y siete; Chile, en el treinta y nueve; Colombia, en el cuarenta y tres; Perú, en el cincuenta y seis; y Brasil, en el sesenta y dos. España y Costa Rica, además, destacan en las categorías de salud y bienestar, felicidad personal y opciones para el ocio; México y Ecuador, en las dos últimas; y Argentina, en ocio.
Los países en los que es más fácil establecerse para los emigrantes encuestados son, por orden, México, Costa Rica, Uganda, Malta, Nueva Zelanda, Filipinas, Rumanía, Ecuador, España y Taiwán. Argentina se encuentra en el puesto quince; Colombia, en el diecisiete; Perú, en el veinticinco; Panamá, en el treinta y uno; Brasil, en el treinta y tres; y Chile, en el cincuenta. México y Costa Rica sobresalen en simpatía, la sensación de bienvenida y en la sencillez para entablar amistad; Ecuador, en las dos últimas; España, en la bienvenida; y Argentina, en lo amigables que son sus gentes.
Por otra parte, los países en los que los expatriados trabajan más a gusto, por orden, son Luxemburgo, Taiwán, Alemania, Nueva Zelanda, Malta, Panamá, Austria, Noruega, República Checa y Australia. Con México nos topamos en el puesto dieciocho; con Costa Rica, Colombia y Ecuador, en los puestos del veintiocho al treinta respectivamente; con Chile, en el cuarenta y cinco; con Perú, en el cuarenta y ocho; con España, en el cincuenta y cuatro; con Argentina, en el sesenta y dos; y con Brasil, en el sesenta y cinco. Es decir, Argentina y Brasil son dos de los diez países donde resulta más desagradable trabajar.
México destaca en las posibilidades para llevar una buena carrera profesional, y Panamá, en la seguridad en el puesto de trabajo; Ecuador y Costa Rica, en el balance entre la vida laboral y la personal. Y los emigrados consideran que las semanas de trabajo son de buena duración en España, todo lo contrario que en Panamá.
En cuanto al coste de vida, los países que estiman más razonables en ese sentido, por orden, son Ucrania, Tailandia, Taiwán, Vietnam, México, Hungría, Ecuador, República Checa, Filipinas y Polonia. España se encuentra en el puesto doce; Colombia, en el catorce; Perú, en el veintiuno; Panamá, en el treinta y tres; Chile, Argentina y Costa Rica, del cuarenta y seis al cuarenta y ocho respectivamente; y Brasil, en el cincuenta y cuatro. Y las viviendas son bastante asequibles según los encuestados en Ecuador, México y Colombia.
Y por último, es inevitable referirse a los países en los que los expatriados se sienten menos satisfechos, que son, por orden, Kuwait, Grecia, Nigeria, Brasil, Arabia Saudí, Egipto, Mozambique, Catar, Italia y Tanzania. En general, se trata de unos resultados sorprendentes los del Expat Insider 2016, no tanto respecto a los países que más extranjeros reciben, sino más bien a sus preferencias. Y si alguno de vosotros está planteándose emigrar, quizá sería conveniente tener en cuenta las opiniones de aquellos que ya han recorrido ese mismo camino.