En una respuesta de la Agencia Nacional de Seguridad de Tráfico en Carretera de los Estados Unidos a Google, reportada primero por Reuters, en el que la subsidiaria de Alphabet preguntaba a la agencia cómo podría homologar vehículos presentes y futuros bajo las condiciones actuales.
Google específicamente quería saber el qué y el cómo sería considerado a nivel de conductor y responsabilidad final. Google ofrecía tres opciones.
- La posición o demarcación de "conductor" no tiene sentido en un sistema auto dirigido
- El "conductor" podría ser denominado el propio sistema auto dirigido.
- El "conductor" podría ser denominado la persona situada en el asiento delantero izquierdo, tenga o no la capacidad para dirigir el vehículo.
La agencia gubernamental americana responde, que la indicación correcta bajo la nueva regulación y propuestas sería la segunda opción, así pues, el sistema de conducción autónoma sería designado como el conductor, y no alguno de sus ocupantes. Es decir, el responsable legal sería el propio software.
No es el final del camino, la misma carta de respuesta explica como "Google aún tendrá que demostrar si, y como, un vehículo autónomo alcanzaría un estándar desarrollado y diseñado para conductores humanos".
La decisión hace más sencilla la llegada de los vehículos autónomos completos, y haría más fácil de eliminar legislación como la californiana actual, que requiere que aunque los vehículos tengan capacidad de operación autónoma, dispongan de una posición con un volante, restringiendo así los cambios en posible diseño en este método de transporte. En la propia pregunta inicial de Google, fechada en noviembre de 2015, Google afirmaba que incluir sistemas tradicionales de dirección, freno y aceleración en vehículos autónomos, podría ser perjudicial para la seguridad de los ocupantes y agentes externos al vehículo.
La respuesta es también una luz que permitirá a otras agencias nacionales y supranacionales tomar nota para sus propias decisiones futuras.