Aprender fotografía

Créditos: AskMen

Aprender fotografía, dos palabras que en ocasiones terminan obsesionando e incluso asustando tras adquirir por primera vez una cámara. Leer los manuales, apuntarse a cursos de iniciación, o ver videotutoriales son algunas de las medidas en las que se suele pensar para contrarrestar nuestra inexperiencia. Nada de eso.

Aunque tampoco niego que puedan ser útiles, la mejor manera de formarse será la propia práctica. Tendremos que lanzar muchas fotos desenfocadas, subexpuestas, o sobrexpuestas antes de llegar a controlar muchas de las funciones disponibles con nuestra cámara. Y ni aun así lo haremos siempre.

Pero existe algo que, por lo general, suele aterrorizar a gran parte de los usuarios que se inician en el mundo de la imagen: la fotografía manual. Y creo que los motivos no se encuentran justificados.

Fuji_LX100_05

Especialmente, con la llegada de la fotografía digital se permite que experimentar con nuestras imágenes sin que esto tenga un coste para nosotros. Aunque es cierto que la cortinilla de nuestro obturador tiene una vida limitada a un número de disparos, no es nada comparable con el hecho de comprar un carrete analógico donde únicamente tengamos disponibles 36 tomas.

Manejar nuestra cámara en manual no es algo complicado

Sin embargo, manejar nuestra cámara en manual no es algo complicado. Si simplificamos al máximo la esencia de lo que supone hacer fotos, básicamente se trata de controlar cómo la luz es administrada por un dispositivo. Y para controlar la luz, las herramientas sobre las que debemos instruirnos son solo tres: la ISO, la apertura y la velocidad de obturación. Analicemos cómo afecta cada una de ellas.

ISO

Prueba de ISO Sony A7 II

Es la más sencilla de todas las tres herramientas, lo cual no implica que el resto sean complicadas. En la fotografía analógica, la sensibilidad ISO estaba determinada en función del carrete que utilizábamos. Es decir, cuando comprábamos el negativo, las características que provocaban ese aumento de luz se encontraban en la propia película.

Cuanto más alto sea al número utilizado, más luz tendremos en nuestra instantánea. Esto puede parecer la panacea para muchos fotógrafos, sin embargo, especialmente en las cámaras digitales, la calidad de la toma se verá afectada en función de lo elevada que sea la sensibilidad empleada.

 ISO 10.000. f/5.6. VO 1/80.
ISO 10.000. f/5.6. VO 1/80.

El ruido será uno de los principales inconvenientes manifestados en la imagen, algo que inevitablemente también afectará a las propiedades de ésta. En la fotografía digital, la sensibilidad se crea a partir de impulsos electrónicos generados por el procesador durante la toma, las capacidades de nuestro dispositivo para utilizar altos valores de ISO estarán determinadas por lo avanzado que sean las características de su sensor o su procesador.

Como ejemplo de ello podemos señalar la recientemente analizada Sony A7 II, la cual permite utilizar hasta valores de 25.600 de ISO sin que la calidad sea sumamente deplorable.

- Alto valor de ISO (25.600) = más luz = más ruido en la imagen
- Menor valor de ISO (100) = menos luz = menos ruido en la imagen

Apertura

Créditos: revela2estudio
Créditos: revela2estudio

La apertura de nuestra lente se corresponde con el número f que en ese momento tengamos ajustado en la cámara. Es un elemento de gran importancia para aprender fotografía, que si controlamos, puede dar muchísimo juego en las instantáneas que realicemos.

El número f que hemos mencionado con anterioridad es la relación de dividir el diámetro de la lente entre la distancia focal utilizada. Por lo tanto, cuanto más pequeño sea el número f, más luminosidad podremos captar con nuestra escena. Mientras que, cuanto más alto sea el diafragma, más cerradas se encontrarán las aspas que dejan pasar la luz al sensor, permitiendo así menos cantidad de información lumínica.

Pero variar el diafragma no solo implica tener más o menos luz, sino que también modificaremos la profundidad de campo disponible en la toma. Una apertura mayor (f/1.8) reducirá en gran medida la profundidad de campo de nuestra imagen. Así, el espacio por delante y detrás de nuestro plano enfocado se encontrará más o menos borroso en función del número f que tengamos, aunque también influyen otros factores como la distancia focal.

- Mayor número f (f/21) = menos luz = más profundidad de campo (menos desenfoque)
- Menor número f (f/1.8) = más luz = menos profundidad de campo (más desenfoque)

Velocidad de obturación

Créditos: eltrueno
Créditos: eltrueno

La velocidad de obturación es el último de los tres grandes elementos señalados para aprender fotografía. Se trata del tiempo que la cortinilla interna de nuestro dispositivo se encontrará abierta, y por lo tanto dejando pasar luz.

El número que tengamos en nuestra cámara expresa la división de ese valor entre un segundo. Por ejemplo, si utilizamos 1/250 el tiempo de exposición será menor que al emplear un 1/60, ya que dividir un segundo entre 250 nos da como resultado un duración menor de dicha exposición.

- Mayor número de exposición (1/500) = menos luz = disparo más rápido
- Menor número de exposición (1/60) = más luz = disparo más lento

Al controlar la ISO, la apertura y la velocidad de obturación ya tendremos base suficiente para experimentar cómo los valores de éstos nos otorgan diferentes fotos. Aprender fotografía, al fin y al cabo, todavía sigue siendo algo muy puritano en su esencia. Tras dominar lo básico, el resto de aspectos solo será cuestión de práctica.

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