La increíble colección acuñada por Marion Stokes en un vetusto almacén no tiene precio. Bueno, en realidad sí, unos 100.000 dólares, según eBay. Pero los casi doscientos productos, con su embalaje original que esta mujer recopiló a lo largo de su vida suponen mucho más que simples objetos de coleccionista. Son la muestra de una fan incondicional de Apple.
Hay a quién le da por coleccionar las cosas más variopintas. Sin embargo a Marion Stokes lo que le dio fue por coleccionar a Apple. Y no decimos objetos de Apple, no. Marion no solo se hizo con una asombrosa cantidad de productos sino que, entre otras cosas recopiló más de 35 años de anuncios de Apple en cintas de vídeo, desde 1977 y fue durante toda su vida una gran inversora de Apple y fan de Macintosh.
Marion Stokes y su colección
Marion Stokes era una bibliotecaria y productora de televisión local de Philadelphia. Su muerte, en 2012, llevó al descubrimiento de una de las mayores colecciones de anuncios de Apple grabadas en cinta de la historia: más de 140.000 cintas con todo el material. Pero no se quedó la cosa ahí. Marion Stokes poseía más de 200 productos guardados y perfectamente embalados entre sus haberes. Entre ellos se encuentran cosas como un Lisa 2/10, un Macintosh 512k, un NuBus PowerMacs, un Workgroup Server 7250, eMacs y iMacs de todos los tipos. También hay portátiles, periféricos de todas las clases y dispositivos no directamente relacionado con los Mac, todos ellos en perfectas condiciones y en sus embalajes originales.
Ahora toda esta colección, que permanece en el almacén donde Marion Stokes los guardaba, está a la venta, como explicábamos, por la suma de 100.000 dólares. La oferta, disponible en eBay está abierta al mejor postor y ya ha recibido un par de ofertas que han sido rechazadas. El valor actual de la colección, incrementada por el coleccionismo puede ser mucho mayor que lo que supone revalorizar los componentes. Pero lo que si que no tiene precio es la dedicación que la Sra. Stokes le dedicó a Apple. No sabemos si Marion Stokes era una incondicional o simplemente valoraba en gran medida el valor de la tecnología, pero lo que si que podemos decir, sin miedo a equivocarnos es que su colección es una de las más asombrosas del mundo.