Ya dijimos la semana pasada que esta misma semana se presentarían smartphones con pantallas curvadas (o flexibles, pero sin poder flexionarlas dado que van ligadas a otros elementos no flexibles todavía). Sea como fuere, se apuntaba tanto a LG como a Samsung. En este último caso, los rumores apuntaban a un Samsung Galaxy Note 3 con pantalla curvada. Desde Twitter, evleaks ha despejado dudas sobre su apariencia. Ha mostrado una foto filtrada del Samsung con pantalla curvada que estamos esperando. Guarda bastante parecido con el Galaxy Note 2, pero no está nada claro que vaya a formar parte de la gama Note (característica por usar el S Pen) o abrirá una nueva gama propia dentro de Samsung. Aunque sí tiene trasera de polipiel, como el Note 3.

Lo primero que tendrá que hacer Samsung o LG cuando lleguen estos terminales es convencernos de la utilidad de un smartphone con pantalla curvada. Ahora mismo, parecen un mero puente hacia las pantallas flexibles al 100 %, con componentes que permitan que todo el smartphone sea flexible, y con ello tener pantallas más finas y que incluso consuman menos energía. Si se cumplen estas filtraciones (y la fuente de la que provienen no deja lugar a dudas), quedarán meras pantallas curvadas, con la obligatoria pregunta de para qué, más allá de ayudar a la ergonomía ya que cuenta con una forma más natural para la mano.

Pantalla flexible de LG

En esa misma línea parece que movió ficha hoy LG, con sus baterías flexibles para smartphones y pulseras. Estas últimas, unos meses después de que LG se metiera en el jugoso terreno de las pulseras que monitorizan la actividad del usuario, donde comparte campo de batalla con Nike, Fitbit, Jawbone y compañía. ¿Serán los dispositivos flexibles la próxima revolución de los dispositivos móviles? Dudo que sea algo aplicable a cualquier dispositivo, pero es sin duda un buen escenario para que evolucione la tecnología wearable.