El juego móvil Send Me to Heaven es uno de los casos más curiosos que podrán encontrarse en el mundo del entretenimiento digital, ya que parte de un planteamiento en donde la idea primordial consiste en aprovechar las capacidades técnicas de tu smartphone para poder arriesgarlo a que el usuario lo destruya, casi voluntariamente.
Desde una cierta perspectiva, esta aplicación puede ser concebida como una una manifestación de tecnología disruptiva, donde la interfaz de su programa es utilizada como un modo de extensión hacia el sentido de uso de estos dispositivos, incluso cabría en él un discurso socio-crítico sobre el uso absurdo que damos a estos dispositivos, sin embargo es un juego simple, directo y peligroso.
Desarrollado por los amigos de Carrot Pop, el juego móvil Send Me to Heaven (abreviado como SMTH) se define a sí mismo como "un juego deportivo", donde su dinámica consiste en simplemente descargar la app, correrla en nuestro smartphone, e inmediatamente lanzarlo hacia arriba, tan alto como sea posible, el objetivo consiste en lograr la mayor altura de lanzamiento que el jugador pueda alcanzar, para luego atrapar el teléfono y conocer el registro de altitud capturado por el móvil. El riesgo de todo esto, obviamente, es que el jugador no pueda atrapar el teléfono en su descenso y termine irremediablemente estrellándose contra el suelo.
La posibilidad de hacer añicos un smartphone de última generación tal vez podría resultar tentadora para aquellos usuarios que posean algún tipo de seguro, o que no tengan inconveniente alguno en volver a gastar lo que ya invirtieron para adquirir el primero. Pero lo cierto es que la gente se está volviendo loca por este título, a 24 horas de haber sido lanzado en Google Play, el juego móvil Send Me to Heaven ya ha alcanzado más de 5 mil descargas, un valoración de 4.4 sobre 5 y un mar de comentarios por el estilo de "lancé mi Galaxy S4 y lo estrellé, se rompió la pantalla táctil, LOL".
Mientras tanto, en la App Store de Apple, el desarrollo de una versión para iOS de este título fue prohibido, y su descarga es imposible por el momento para cualquier iPhone. Aún así, el programa presenta algunos problemas, si la rotación automática de pantalla está activada no registra la altura de lanzamiento, la interfaz del juego es simplona, nada estética, minimalista y chillante, con textos y gráficos en tonos negros sobre fondos amarillos, como un letrero de carretera. Pero su gran secreto, más allá de su planteamiento provocativo, es que el bendito título posee integración de GPS, para saber si otros usuarios están jugando cerca de ti, y así poder armar un encuentro directo, así como la inclusión de marcadores de liderato, con el Top 10 regional, mundial, semanal y del día, donde cualquier jugador podría imponer su mayor marca y ser el número uno del planeta, sin importar el destino de su smartphone.
De acuerdo con el código de aprobación de aplicaciones, para poder tener presencia en la App Store de Apple, el desarrollo del juego móvil Send Me to Heaven no pudo ser autorizado por "fomentar comportamientos que pueden dañar el dispositivo del usuario", lo cuál, irónicamente es su mayor atractivo.
Las reseñas de los usuarios en Google Play y la página oficial de Facebook son bastante "positivas", por llamarlas de algún modo. Se le otorgan puntajes elevados de evaluación porque hace lo que promete y el mayor motivo para descargar este juego es por la ocurrencia de disfrutar el momento.
Un caso curioso es que, a pesar de ya reportar algunos incidentes, donde el dispositivo termina impactando a peatones o amigos, muchos usuarios han comenzado a utilizar este juego como parte de un ritual de cambio de móvil, donde están tomando su viejo Android, que posee ya algún problema serio de funcionamiento, y descargan la aplicación para lanzarlo a las alturas y dejarlo estrellarse, como una suerte de funeral vikingo para su teléfono dejando el registro de su récord de altitud, antes de migrar al nuevo modelo que ya adquirieron.
El destino que sufrió este juego con Apple no es exclusivo para esta plataforma, y tal vez exista la posibilidad de que luego de algunos Android más rotos también vaya ser prohibida la aplicación. Hasta el momento el mayor récord es de 10.57 metros de altitud, mientras tanto, deberían aprovechar para probar su mejor marca, at least for the lulz...
Descarga: Android. Gratis.
