Un grupo de investigadores de la Universidad de Washington ha dado con la proteína necesaria para regenerar los nervios periféricos lesionados. El hallazgo en ratones tendría implicaciones que podrán mejorar la recuperación después de una lesión nerviosa en las extremidades. Además, abre nuevas vías de investigación hacia la regeneración nerviosa en la activación del sistema nervioso central, conocido hasta ahora por su incapacidad para sanar.
Y es que los nervios periféricos proporcionan el sentido del tacto a la vez que "expulsan" a los músculos que mueven los brazos, piernas, manos y pies. A diferencia de los nervios del sistema nervioso central, los nervios periféricos pueden regenerarse después de que se cortan, sin embargo, los mecanismos detrás de esta regeneración no se conocían bien.
Y es aquí donde el estudio adquiere su importancia. Los científicos han identificado a la proteína DLK, la cual regula las señales que indican a la célula nerviosa que se ha lesionado. La proteína muestra el camino a la regeneración.
Según el profesor Aaron DiAnthony:
DLK es una molécula clave que une una lesión en la respuesta del nervio a la lesión, la que permite que los nervios se regeneren. ¿Cómo sabe un nervio lesionado que lo está? ¿cómo entiende la información y la transforma en un programa de regeneración o cómo las conexiones vuelven a crecer? ¿o por qué sólo el sistema nervioso periférico responde de esta forma mientras que el sistema nervioso central no lo hace? Creemos que DLK es la respuesta.
Los investigadores cuentan que el cuerpo de las células que contienen el núcleo de un nervio periférico se encuentran en la médula espinal. Durante el desarrollo temprano los nervios envían una serie de cables largos y finos, una serie de empalmes llamados axones a las puntas de los dedos de las manos o los pies.
Una vez que los axones alcanzan sus objetivos como puede ser un músculo, se detienen y se extienden permaneciendo prácticamente sin cambios en la vida del organismo a menos que estén dañados.
Cuando el axón se corta en algún punto entre el cuerpo de la célula en la médula espinal y el músculo, la pieza de axón que ya no está conectada al cuerpo comienza a desintegrarse.
DiAnthony y sus colegas encontraron que DLK acelera la recuperación del nervio periférico. Según los investigadores:
Ahora, una neurona que ha visto a una lesión anterior, tiene un programa diferente de regeneración sobre uno que nunca ha sido dañado. Esperamos ser capaces de identificar los factores que conducen a la regeneración mejorada después de una segunda lesión. Hemos encontrado que se activa por un factor de DLK y el siguiente paso es activar DLK en una neurona nueva lesionada para ver si tiene una regeneración aún mejor.
El estudio concluye que además de acelerar la recuperación del nervio periférico, la proteína podría tener consecuencias en el sistema nervioso central y una hipotética regeneración.