Cada fotografía concebida en el mundo se basa en un pilar de tres bases. Toda imagen, sea de manera automática o manual, se posiciono sobre estas tres patas para exponer la imagen y dar como resultado la fotografía que se buscaba. Si apenas acabas de iniciar tu recorrido, entender el triangulo de la exposición te ayudará a entender el funcionamiento y lógica de la exposición y, por ende, a tomar mejores fotografías.
Este triangulo se compone de la velocidad de obturación, la apertura de diafragma y el valor ISO. Cada pilar afecta a la exposición de la imagen o, básicamente, que tan clara o que tan oscura será. A la vez, cada pilar puede ser modificado y conservar aun así la misma exposición si es compensado este cambio en otro de sus pilares. Esto es conocido como la regla de reciprocidad. Si elevas el valor de velocidad ISO y a la vez reduces la velocidad de obturación, la imagen será exactamente la misma, al menos en cuestiones de luminosidad. Lo mismo aplica a sus otras bases.
El valor ISO controla que tan sensible es la película o el sensor a la luz. Con películas tradicionales, este valor es fijo; puedes comprar películas ISO 100 o ISO 1600, siendo el número más alto, el más sensible a la luz. En las cámaras digitales este valor es dinámico y puede ser modificado en cada disparo. Esto da mas versatilidad debido a que dependiendo la cantidad de luz disponible en el lugar, se puede hacer más o menos sensible al sensor.
La apertura de diafragma controla que tanta cantidad de luz se deja pasar a través de la lente. Esta lente, mediante la acción de las palas del diafragma, cierra o abre su apertura controlando que tanta luz alcanza el sensor. Cuanto mas bajo sea el valor, medido en números f, mayor será la cantidad de luz ingresada.
La velocidad de diafragma controla el tiempo que el sensor es expuesto a la luz. Al disparar, las cortinas del disparador se accionan, permitiendo el paso de la luz por un determinado tiempo, medido en segundos o fracciones de segundos. Cuanto mas alto el numero, menor será el tiempo que la luz impactará en el sensor.
Cada pilar trae aparejado un efecto secundario. Modificar un pilar, además de cambiar ese valor, tendrá un determinado efecto en su propio efecto secundario. La velocidad ISO, cuanto mas elevada sea, mayor ruido producirá. Esto puede tener fines artísticos o ser algo molesto, dependiendo de la "calidad" de este ruido. La apertura de diafragma, cuanto mas baja sea, menor profundidad de campo tendrá la imagen. Esto es especialmente útil en la fotografía de retratos, ya que aísla al sujeto del fondo. Por ultimo, la velocidad de diafragma, cuanto mas lenta sea, mas movimiento tendrá la imagen. Por movimiento se puede tratar del movimiento de los sujetos frente a la cámara, o el propio movimiento que introduce la mano del fotógrafo. Esto, nuevamente, puede tener fines artísticos o ser un problema.