JB Straubel, quien fue uno de los fundadores de Tesla y Director de Tecnología de la compañía de movilidad eléctrica, fundó en 2017 una empresa de reciclaje de baterías llamada Redwood Materials, y años después está consiguiendo muy buenos resultados pese a la polémica relacionada con este proceso y otros desafíos.
En cualquier caso, la compañía busca poner fin a uno de los mayores problemas del coche eléctrico: las baterías defectuosas o desgastadas, pues son uno de los componentes más contaminantes de este tipo de vehículos.
Redwood Materials cuenta a día de hoy con la planta de reciclaje de baterías más grande América del Norte. La compañía fundada por JB Straubel ha conseguido crear un proceso que recupera hasta el 95% del litio que contienen las baterías usadas, tanto de vehículos eléctricos, como de otros aparatos electrónicos, así como gran parte del cobre, el níquel, el manganeso o el grafito que incluyen estos componentes.
En una entrevista a Bloomberg, el ex directivo de Tesla afirmó que estos materiales se utilizan para fabricar componentes complejos de baterías que, habitualmente, se importan desde otros países.
Asegura, además, que el objetivo de su compañía es “diseñar una solución para que el país recupere y recicle la mayor cantidad de material lo más rápido posible”, y que si bien han surgido muchas empresas de reciclaje de baterías a raíz del éxito de Redwood Materiales “pensando que sería algo fácil”, no es algo que se construya de la noche a la mañana sino “durante muchos años, tal vez décadas”.
Los desafíos de Redwood Materials en cuanto al reciclaje de baterías
El que fue Director de Tecnología de Tesla también ha hablado con el citado medio sobre los desafíos de una empresa de reciclaje de baterías, que van desde la falta de financiación por parte del Gobierno estadounidense, hasta la construcción o la dificultad a la hora de encontrar clientes. Sin embargo, el reciclaje de baterías no está exento de polémicas.
El reciclaje de baterías también puede suponer un alto impacto medioambiental. Sobre todo, si no se reciclan otros componentes como el magnesio o el níquel. En este caso, Redwood Materials ha diseñado procesos de reciclaje para poder utilizar de nuevo otros tipos de materiales que pueden ser perjudiciales para el medio ambiente.
Uno de ellos es un proceso bautizado como hidrometalurgia, donde se hace uso de soluciones líquidas para —digamos—, limpiar materiales como el níquel, el litio y que estos puedan volver a utilizarse. La empresa fundada por uno de los ejecutivos más importantes de Tesla, también realiza un proceso llamado calcinación reductora, que reduce el impacto medioambiental y, concretamente, minimiza la combustión de carbono de los principales materiales de las baterías para reducir las emisiones de CO2.