A diferencia de lo que mucha gente piensa, Elon Musk no fundó Tesla como tal, aunque sí que cuenta —y seguramente así se lo ha ganado— con el derecho de ser reconocido como cofundador a efectos legales y de representación.

La Tesla original (Tesla Motors, no Tesla, Inc.), fue fundada por dos personas hoy semidesconocidas, a las que se añadieron tres más, entre los que estuvo Musk, al poco de empezar. La historia resumida es esta: la compañía fue creada como Tesla Motors el 1 de julio de 2003 por Martin Eberhard y Marc Tarpenning, dos personas a las que enseguida conoceremos más. Eberhard y Tarpenning se desempeñaron como CEO y director financiero, respectivamente.

Ian Wright fue el tercer empleado de Tesla y se incorporó unos meses después. En febrero de 2004, la empresa recaudó 7,5 millones de dólares en fondos, de los que 6,5 millones de dólares fueron puestos por un joven Elon Musk, que había recibido 100 millones de dólares por la venta de su participación en PayPal dos años antes.

Musk se convirtió en el presidente de la junta directiva y el mayor accionista de Tesla nada más llegar. J. B. Straubel, el otro gran nombre además de Musk asociado a Tesla, se incorporó a Tesla en mayo de 2004 como CTO.

Hoy, estos cinco hombres son considerados cofundadores a efectos legales tras un acuerdo que se dio Eberhard y Tesla en septiembre de 2009.

Nadie puede negar que Tesla no sería lo que es sin Musk, ni Musk sin Tesla. Pero esta la historia de las otras personas que pasaron desapercibidas en la creación de una marca que, posiblemente, ha cambiado la industria automovilística.

Elon Musk, de inversor a cuarto CEO de Tesla

Martin Eberhard y Marc Tarpenning, fundadores originales de Tesla.
Martin Eberhard y Marc Tarpenning, fundadores originales de Tesla.

Hace años y medio Martin Eberhard y Marc Tarpenning, los fundadores originales, recordaron en un documental para la CNBC sus primeras etapas y cómo fue fue construir y entregar los primeros vehículos Tesla Roadster. También, de lo que costó convencer al mundo de que los coches eléctricos podían ser tan atractivos como los deportivos de lujo, y cómo trajeron a Elon Musk a bordo.

Eberhard y Tarpenning conocieron por primera vez a Musk en una reunión de miembros de la Mars Society, una conocida organización sin ánimo de lucro que, desde finales de los 80, reúne a personas interesadas en el futuro de la posible vida humana en el Planeta Rojo y la exploración espacial, de expertos a simples aficionados. Musk pertenecía a ella desde antes de fundar SpaceX.

Eberhard, ingeniero eléctrico de formación, ya comentaba en los inicios de su Tesla que quería hacer una empresas de automóviles centrada en la tecnología. Él no acabó muy bien con Tesla, saliendo de la empresa y llevando adelante la demanda que acabó con el acuerdo que dio permiso para que hubiera hasta 5 cofundadores, aunque aseguraba que seguía apoyando el proyecto de Tesla. Actualmente, está trabajando en una tecnología que haga que las baterías de los vehículos eléctricos sean más asequibles que las actuales, sin sacrificar la seguridad, la potencia o la calidad.

Tarpenning, ingeniero informático por su parte, reconocía en la citada entrevista que aún habla con Musk de vez en cuando. Él salió de Tesla justo cuando estaban desarrollando el Modelo S.

Ahora, Tarpenning trabaja asesorando a empresas emergentes con vocación medioambiental e invirtiendo en ellas como socio del fondo Spero Ventures. Ambos salieron bien cubiertos económicamente, aunque, por supuesto, su fortuna podría haber sido mucho mayor de mantener un mayor número de acciones debido a la evolución de Tesla en bolsa durante los últimos dos años.

La Tesla Motors de antes de Tesla Inc: un origen que nace del libro electrónico

Tanto Eberhard como Tarpenning crecieron en California. Se conocieron cuando Tarpenning fue a visitar la empresa Wyse Technologies para una investigación, donde Eberhard trabajaba en ese momento.

En 1997, Eberhard y Tarpenning cofundaron NuvoMedia, una empresa de libros electrónicos que produjo el Rocket eBook, uno de los primeros libros electrónicos. Después de solo tres años, vendieron su empresa por 187 millones de dólares.

Para su siguiente proyecto, con aquel dinero, Eberhard quería crear “un fabricante de coches que fuera también una empresa tecnológica”. Y así, el 1 de julio de 2003, se asoció de nuevo con Tarpenning para lanzar Tesla Motors.

La salida de los fundadores originales

En agosto de 2007, Eberhard fue relegado del puesto de CEO. Durante ese tiempoElon Musk, que ya era el máximo accionista con mucha diferencia, impulsó la entrada de más capital en la empresa. “No hubo ninguna discusión. No pude escuchar lo que dijeron. No pude defenderme. Me sentí totalmente abandonado”, comenta al respecto Eberhard, quien se querelló porque el Consejo de Administración en el que se tomó la decisión de relegarlo se celebró sin su presencia, algo requerido.

Martin Eberhard, durante la presentación del Roadster. Wikimedia Commons
Martin Eberhard, durante la presentación de un prototipo del Roadster. Wikimedia Commons

Como vía intermedia, Tesla, ya con Musk tomando decisiones, designó a Eberhard director tecnológico. Aquello no salió bien. Eberhard acabó dejándolo a principios de 2008.

Tarpenning salió de la empresa poco después, y con la desaparición de los fundadores originales, Musk se convirtió en el CEO de Tesla, puesto que mantiene hasta ahora.

“Creo que la Elonidad de Elon ha aumentado con los años”, decía en aquel documental Martin Eberhard, con cierta ironía y seguramente sin falta de razón.

La visión de Musk sobre esta historia también está clara. Él defiende que sí que fundó Tesla. Y, al menos técnicamente y teniendo en cuenta la actual, tiene razón. Tesla Inc. abosirvió Tesla Motors ya con Musk y Straubel dentro.

El mes pasado, a raíz de un tuit que recordaba esta historia y señalaba a Musk como engañar acerca de su condición de fundador, Musk tuiteaba: “Ni de lejos. [Tesla Motors] Era una empresa fantasma sin empleados, sin propiedad intelectual, sin diseños, sin prototipos, literalmente nada más que un plan (de negocios) para comercializar el coche T-Zero de AC Propulsion, que me presentó JB Straubel, no Eberhard. Incluso el nombre ‘Tesla Motors’ era propiedad de otros”. escribió Musk.

Musk afirmó que si se siguiera la lógica adoptada en la narración que pinta a Eberhard y Tarpenning como los fundadores de Tesla, entonces él sería el único “fundador” de PayPal, ya que puso en marcha la empresa que acabó convirtiéndose en el gigante de los pagos en línea. Tal argumento, señaló Musk, no se sostiene.

El presente de los otros dos cofundadores es más conocido. Straubel dejó Tesla en 2019 para enfocarse en su empresa Redwood Materials, dedicada al reciclaje de baterías y basura electrónica. Por su parte, Ian Wright ha prosperado con WrightSpeed, empresa que añade módulo eléctricos a camiones y que, por ejemplo, trabaja para flotas de servicios de recogida de basuras aportando kilometraje eléctrico a camiones que antes eran puramente de combustión.