La ceremonia de los premios Óscar de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood, está cada vez más cerca. El 10 de marzo, se revelará la incógnita de lo que resultó escogido como lo mejor del año. En especial, luego de los meses de incertidumbre que trajo consigo la huelga de guionistas y actores. Pero lo cierto es que la mayor celebración de Hollywood, demuestra que la industria sigue siendo fuerte y que, a la vez, es lo suficientemente robusta como para sobrevivir a sus peores épocas.
Algo que la edición 2024 deja en claro. No solo será la celebración de la recuperación en taquilla del mundo cinematográfico. A la vez, reconocerá el esfuerzo detrás y delante de cámara, para lograr mantener la vitalidad del negocio cinematográfico. De reconocer el fenómeno Barbenheimer a celebrar las obras más personales de los mejores directores de cine contemporáneos. La ceremonia se perfila como un gran tributo a la historia del séptimo arte. A la vez, el reconocimiento de la importancia a través de la cultura pop contemporánea.
Lo que lleva a preguntarse, ¿qué ocurre cuando un mismo artista recibe más de una vez el homenaje? Lo más evidente, entrar en el panteón de los más rostros más reconocidos del mundo del espectáculo. Pero además, demostrar que el premio es una manera de rendir tributo al trabajo y esfuerzo a un nivel por completo nuevo. Te dejamos los únicos actores y actrices que, hasta ahora, han obtenido tres galardones — y en un caso, uno más — y que han dejado su huella indeleble. Una mirada al Oscar como vehículo para sostener al cine como un mundo artístico en pleno apogeo.
Katharine Hepburn
La actriz, reconocida por su carácter formidable además de su indudable talento, marcó un hito que continúa invicto en la actualidad. La de obtener cuatro Premios Óscar como Mejor Actriz. Mucho más, recibir doce nominaciones a lo largo de su extensa e interesante carrera. Lo que la convierte en una de las figuras más extraordinarias del cine dorado y más allá, de la industria en su totalidad.
El primer galardón lo obtuvo en 1933 por el clásico Gloria de un día, dirigido por Lowell Sherman. Ya convertida en una de las figuras más fulgurantes de la meca del cine, Hepburn recibió un segundo en 1967 por Adivina quién viene esta noche de Stanley Kramer. La actriz alzaría la tercera estatuilla al año siguiente por su papel en El león en invierno de Anthony Harvey. Por último, gracias a En el estanque dorado de Mark Rydell, recibiría otra estatuilla en 1981.
Meryl Streep
Para sorpresa de nadie, la actriz se encuentra en uno de los puestos más altos en esta lista de ganadores de Premios Óscar. Razones no faltan, con más de cincuenta años de carrera, no es solo una de las actrices más versátiles de Hollywood. A la vez, la que prácticamente puede interpretar cualquier papel. Lo que le ha permitido estar nominada en 21 ocasiones a lo largo de las últimas décadas. Un récord en apariencia imbatible, que la convierte en una de las mejores artistas que la meca del cine ha tenido jamás.
En cuanto al Oscar, Streep ha recibido dos como Mejor intérprete principal gracias a La decisión de Sophie (1982) de Alan J. Pakula y otro por La dama de hierro (2011) de Phyllida Lloyd. Como actriz de reparto, alzó la estatuilla por Kramer vs. Kramer (1979) de Robert Benton
Jack Nicholson
Otro nombre familiar para la lista, es el del actor conocido por su sonrisa siniestra. Nicholson puede presumir de una extensa carrera de cincuenta años, que abarca todos los géneros y registros. Algo que le ha valido ser un nombre recurrente en la lista de nominados con doce nominaciones. La mayoría de ellas como actor principal.
En esa categoría, el intérprete ha obtenido dos galardones. Uno en Alguien voló sobre el nido del cuco (1975) de Miloš Forman y otro en Mejor… Imposible (1997) de James L. Brooks. Como actor de reparto, Jack Nicholson obtuvo una por La fuerza del cariño (1983), también de la mano de Brooks.
Daniel Day-Lewis
El actor irlandés es uno de los que ha sido galardonado, prácticamente en cada oportunidad que ha sido nominado. Con seis menciones a sus actuaciones a lo largo de su carrera, ha obtenido tres Premios Óscar. Siempre en el rubro de mejor actor principal.
El primero lo recibió por la controvertida Mi pie izquierdo de Jim Sheridan en 1989. Luego obtendría otro reconocimiento por Pozos de ambición (2007) de Paul Thomas Anderson, basada en la dolorosa novela de Upton Sinclair. Finalmente, obtendría un tercero por Lincoln (2012) de la mano de Steven Spielberg.
Frances McDormand
La actriz tiene una marca parecida a la que ostenta Daniel Day-Lewis. Con seis nominaciones, ha obtenido tres Premios Óscar, todos como Mejor actriz. El primero con Fargo (1996) de Joel Coen. Después con Tres anuncios en las afueras (2017) de Martin McDonagh.
Por último, McDormand alzaría con la estatuilla por el atípico drama intimista
Nomadland (2020) de Chloé Zhao. Lo que la convierte en una de las artistas con mayor cantidad de reconocimientos de la Academia en su haber.
Ingrid Bergman
La magnífica actriz sueca, también fue una de las favoritas de los Premios Óscar. Con su registro contenido, melancólico y emocional, se convirtió en una figura recurrente y celebrada entre la crítica especializada gracias a dramas desgarradores. Mucho más, al interpretar personajes heridos por traumas catastróficos o en medio de misterioso que le sobrepasan. Lo que le valió 7 nominaciones al premio de la Academia a lo largo de su carrera.
De esas, obtuvo dos estatuillas. Dos como mejor actriz, uno por Luz que agoniza (1944) de George Cukor y otro por Anastasia (1956) de Anatole Litvak, interpretando a la infortunada Gran duquesa de Rusia.
Para 1974, y ya casi en el retiro, volvió para actuar junto al director Sidney Lumet en Asesinato en el Orient Express. Una brillante interpretación que le valió un galardón a Mejor actriz de reparto.
Walter Brennan
Quizás ahora, no sea un nombre muy recordado por los amantes del cine. Pero durante buena parte de era dorada de Hollywood, fue considerado uno de los grandes actores de reparto. Tanto, como para que el término “secundario de lujo” fuera acuñado justo por su capacidad de hacer brillar una producción en papeles discretos.
La hazaña le valió tres Premios Óscar — siempre como actor de reparto — de entre cuatro nominaciones que obtuvo a través de su carrera. El primero destacó su actuación en Rivales (1936) de Howard Hawks y William Wyler. Dos años después, obtuvo otro galardón por Kentucky (1938) y por último, alzaría el tercero por El forastero (1940) de William Wyler.