La startup alemana e-Revolt se ha propuesto que cualquier coche con motor de combustión interna —funcione con gasolina o diésel— se pueda convertir en eléctrico. La compañía ha introducido un muy interesante kit que se encarga justamente de ello.

Si bien no es la primera opción que llega al mercado para convertir un coche convencional en eléctrico, e-Revolt destaca especialmente por su celeridad. La empresa asegura que puede transformar tu automóvil en apenas 8 horas, cuando otras soluciones pueden requerir semanas o meses de trabajo.

El kit de e-Revolt para convertir coches con motores de combustión interna en eléctricos es bastante sencillo y destaca por su versatilidad. De acuerdo con la firma teutona, se puede implementar en más de 40 modelos, y si bien no se han divulgado todos los que son compatibles, sí se han mencionado algunos específicos como el SEAT León, el Audi A3 y los VW Polo y Golf.

Si te preguntas cómo puede e-Revolt convertir un coche de gasolina o diésel en eléctrico en solo una jornada laboral, la respuesta está en cómo ha diseñado su equipamiento. La empresa ha desarrollado una solución bajo la filosofía plug-and-play que le permite, en términos muy simplificados, "extirpar" la motorización convencional y cambiarla por una eléctrica (junto a su correspondiente batería), de un modo sencillo y rápido.

Cómo convierte e-Revolt tu coche de gasolina o diésel en eléctrico

Cómo convierte e-Revolt tu coche de gasolina o diésel en eléctrico

Como indicamos previamente, e-Revolt asegura que el procedimiento para convertir un coche en eléctrico es bastante sencillo. Además, se concreta por intermedio de una red de talleres certificados.

Primero se realiza una inspección técnica al automóvil para controlar que todo esté en orden y posteriormente se procede a quitar el motor de combustión interna y todos los elementos que, una vez completa la transformación, ya no serán necesarios. Hablamos de la transmisión, el tanque de combustible y el tubo de escape, por ejemplo.

Una vez hecho esto, se procede a introducir el kit de conversión bajo el capó. En el mismo espacio donde antes se ubicaba el motor de gasolina o diésel, e-Revolt coloca una estructura que cobija el nuevo motor eléctrico, el pack de baterías y el puerto de carga. Para garantizar que la instalación sea correcta y segura, el equipamiento aprovecha los puntos de anclaje de la motorización original.

Pero esto no es todo, la compañía alemana también saca provecho de un módulo llamado e-CAN. Este componente se encarga de gestionar todo lo vinculado con el sistema eléctrico de impulsión y potencia un nuevo sistema de infotainment que se instala en el habitáculo. Así, desde una pantalla adicional es posible controlar la autonomía, el proceso de carga y acceder a servicios de navegación y otras apps.

Aún falta claridad en algunos puntos

Foto: e-Revolt

La propuesta de e-Revolt se muestra muy atractiva, pero lamentablemente carece de claridad en varios puntos. En primer lugar, no se menciona la potencia del motor eléctrico ni la capacidad de las baterías o su velocidad de recarga. En su web, la empresa alemana solamente menciona que su plataforma ofrece una autonomía de 250 kilómetros con una carga completa. Según le mencionaron a EuroNews, la misma puede extenderse hasta los 300 kilómetros, y que están trabajando para ampliarla todavía más.

Si te preguntas por el precio para convertir tu coche de gasolina o diésel en eléctrico, varía según el modelo. No obstante, la firma indica que está en un rango de entre 12.000 y 15.000 euros. Además, e-Revolt afirma que, pese a las modificaciones, el automóvil no pierde ninguno de sus sistemas de asistencia ni tampoco la cobertura del seguro.

¿Qué sucede con el motor de combustión interna y los demás componentes que se le extirpan al coche? e-Revolt apuntala sus esfuerzos en la economía circular y afirma que todas las partes se reciclan o se reutilizan de forma responsable.