Una neumonía infantil en China está despertando alarmas en todo el mundo, posiblemente por los tintes de 2020 que tiene todo esto. ¿Pero qué es lo que está pasando exactamente?
De momento no se sabe mucho. El pasado 13 de noviembre, las autoridades de la Comisión de Salud China anunciaron que había un repunte muy grande de casos de infecciones respiratorias en el país. Hablaban de casos a nivel general, en todos los grupos de edades y con varios patógenos involucrados. China, el país donde nació la COVID-19, ha sido uno de los que más tiempo han mantenido las medidas preventivas. Sin embargo, ya estaban empezando a relajarlas, por lo que inicialmente se pensó que este podría ser el motivo de ese aumento en la incidencia de infecciones respiratorias.
Sin embargo, con el tiempo se ha observado que se trata de algo mucho más concreto. La mayoría de enfermos son niños, con una neumonía infantil que se extiende a gran velocidad por los colegios, causando síntomas poco convencionales para esta patología. Por eso, este miércoles, 22 de noviembre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha solicitado a China información clínica adicional a la que se aportó en 13 de noviembre, para estudiar la situación en mayor profundidad y buscar las herramientas para ponerle freno.
Salas de espera abarrotadas y síntomas poco habituales
Esta neumonía infantil china parece estar afectando sobre todo a la zona noreste del país, en cuyos hospitales se han reportado salas de espera abarrotadas de niños con sus padres. En Dalian, en la provincia de Liaoning, han tenido que empezar a atender a los niños en los vestíbulos de los centros médicos, a falta de consultas para abastecer la demanda.
Generalmente, los pequeños acuden al hospital con fiebres muy altas. Inicialmente no hay síntomas que indiquen una neumonía, pues esta enfermedad cursa sin tos ni dificultad para respirar. No obstante, las placas de tórax muestran inflamación y nódulos pulmonares, que sí que se relacionan con una neumonía. Las imágenes de rayos X tampoco contienen otros rasgos característicos de la neumonía, como infiltrados pulmonares en forma de parches. Aun así, la enfermedad está clara, lo que no se sabe con seguridad es el origen.
Generalmente la neumonía infantil se debe a la infección de una bacteria llamada Mycoplasma pneumoniae. Pero, dado que en este caso los síntomas son muy diferentes, habrá analizar si es el mismo patógeno o si ha sufrido algún tipo de mutación.
No ha habido casos mortales por la neumonía infantil china
La neumonía infantil causada por Mycoplasma generalmente cursa sin síntomas graves. En esta ocasión, los médicos chinos informan que hay más casos graves de lo habitual, pero muy pocos críticos y, de momento, ninguna muerte.
Esto es importante para hacer un llamamiento a la calma y la precaución. Por supuesto, se deben tomar medidas. Sobre todo en los colegios, que parece que están siendo los principales impulsores de contagios de la neumonía infantil china. También en los hospitales, donde deben reconocer esta nueva sintomatología, tan diferente a la de otras infecciones respiratorias. La población, además, debe seguir las mismas medidas que con la COVID-19. Lavado de manos constante y mascarilla y distancia cuando sea necesario. Por supuesto, evitar el contacto con personas infectadas.
De este modo, habrá que esperar a que la OMS analice la información disponible y los científicos, tanto chinos como de la Organización, busquen el origen de esta enfermedad. Es imposible no encontrar similitudes con 2020, pero no tiene por qué ocurrir lo mismo. Ante todo, calma.