Elon Musk explotó durante el DealBook Summit de The New York Times. Cuando el entrevistador le cuestionó cuál era su opinión sobre los múltiples anunciantes que han abandonado X —antes Twitter— debido a la ineficiente moderación del contenido inapropiado, el magnate respondió de manera contundente:
"No se publiciten. No se publiciten. Si alguien va a intentar chantajearme con publicidad, mejor chantajéame con dinero. Váyanse a la mierda."
Elon Musk.
La reacción del entrevistador y del público, desde luego, fue de sorpresa. No obstante, para no dejar ninguna duda a lo que intentaba transmitir, Elon Musk repitió: "Váyanse a la mierda. ¿Quedó claro? Espero que sí."
El fragmento del vídeo inferior concluye con Elon Musk diciendo: "Hola Bob, aquí en la audiencia". ¿A quién se refiere? Al parecer estaba señalando a Bob Iger, CEO de Disney y quien aparentemente estaba presente en la sala. De confirmarse, su declaración adquiere un nivel de polémica todavía mayor.
Debemos recordar que, desde la semana anterior, múltiples empresas han pausado sus anuncios en Twitter. En algunos casos, se han ido por completo sin la intención de regresar más adelante. ¿La razón? Elon Musk dejó ver su respaldo a una teoría conspirativa antisemita. La controvertida publicación hizo que los anunciantes tomaran la decisión de alejarse.
Y es que, si el propietario no es capaz de comportarse a la altura de su puesto, menos los miles de usuarios que todos los días comparten contenido antisemita. Si bien Elon Musk salió después a decir que no era un antisemita, el daño ya estaba hecho.
"La semana pasada, hubo cientos de historias falsas en los medios de comunicación que afirmaban que soy antisemita. Nada más lejos de la verdad. Solo deseo lo mejor para la humanidad y un futuro próspero y apasionante para todos."
Elon Musk.
A pesar de esa explicación, la Comisión Europea, Apple, IBM, Paramount Pictures, Warner Bros., Lionsgate, Sony Pictures, Universal Pictures y, por supuesto, Disney, dejaron de anunciarse en Twitter de manera inmediata. Cabe mencionar que, hasta el momento, algunas de las entidades mencionadas siguen sin reactivar su publicidad.
De acuerdo a la información de Axios, varios de estos anunciantes solicitaron que Linda Yaccarino, actual CEO de X, renunciara a su puesto. Lo curioso, sin embargo, es que no es una petición derivada de un descontento hacia su gestión, sino como un gesto de protección hacia ella. Consideran que Yaccarino está arruinando su reputación en la red social, pues constantemente tiene que salir a explicar las decisiones o comportamientos de Elon Musk.
Si algún anunciante todavía tenía la esperanza de que Twitter enderezara su camino, con lo sucedido en el DealBook Summit les debería quedar claro que, si no están contentos con el estado actual de la plataforma, tienen las puertas abiertas para marcharse. Ahora bien, será interesante ver cómo influye esta situación en el rubro financiero de la compañía —que está en crisis, por cierto—. Tan solo Apple era el mayor socio publicitario de X…
