Hay dos cosas que debes saber sobre el personaje de Chandler Bing, interpretado por Matthew Perry en Friends. La primera es que durante la temporada inicial de la serie, solo era el alivio cómico del argumento. Pero después los creadores ‎David Crane y ‎Marta Kauffman decidieron explorar, un poco más, el sentido del humor satírico del actor, lo que terminó por convertirse en un éxito. 

Lo segundo, es que la mayoría de sus capítulos más recordados, tienen relación con sus temores, inseguridades y momentos incómodos. El reflejo del extraño momento personal, que el actor estaba pasando en su vida. Según sus memorias, la presión de la fama le hacía sentir observado, angustiado y la mayor parte del tiempo, fuera de lugar. Aun así, ofreció varios de los momentos más memorables de la serie. Lo que después reconocería le permitió lidiar con sus adicciones y preocupaciones.

Te dejamos cinco — de los muchos — grandes momentos de Chandler Bing en la serie Friends. Desde el capítulo que demostró toda su capacidad para el humor físico hasta el que le llevó a tener una cita con una de las grandes actrices de Hollywood. Una selección para recordar al intérprete como lo que fue: un hombre capaz de hacer reír con un brillante y a menudo conmovedor sentido del humor. 

El del apagón (primera temporada)

Como cualquier fanático lo sabe, los capítulos de Friends no tienen título, sino una breve descripción de lo que ocurre. Por lo que El del apagón, dejaba claro que era uno de esos sucesos que serían recordados en el futuro. Lo fue, sin duda. En este episodio, Chandler se encuentra en medio de un desastre eléctrico, atrapado en un cajero automático junto con la modelo de Victoria’s Secret, Jill Goodacre.

Pero, por supuesto, se trata de Chandler y lo que pudo ser un encuentro romántico ideal, termina en uno disparatado. Desde casi morir asfixiado al tragar una bola de chicle hasta jugar con los bolígrafos para pasar el tiempo. El capítulo demuestra la sensibilidad, torpeza y amabilidad nerviosa del amigo más querido en toda su extensión. 

El de después del Superbowl (segunda temporada)

La anécdota ya se conoce: Matthew Perry fue la pareja de Julia Roberts por más de medio año. Y sí, todo empezó con el cameo de la estrella en Friends. La confluencia de circunstancias, además, dio como resultado uno de los grandes capítulos de la serie. En el episodio, Chandler se encuentra con la actriz, que resulta ser una compañera de colegio a la que recuerda vagamente. Lo que fructifica en un apasionado y fugaz romance, que acaba, en claro está, una situación desternillante. 

Luego de convencer a Chandler de usar su ropa interior, Julia Roberts le manipula para desnudarse en público. Únicamente para después, llevarse su ropa y dejarlo encerrado en el baño de caballeros de un restaurante con una tanga de mujer puesta. ¿La solución? Salir con la puerta del cubículo cubriendo su desnudez. 

En el que Eddie se muda (segunda temporada)

En la segunda temporada, Joey (Matt LeBlanc), finalmente tiene éxito como actor, por lo que se muda a un apartamento propio. Lo que desemboca en uno de los giros más hilarantes imaginable. Deseoso de demostrar que la súbita situación no le importa, Chandler busca un nuevo compañero de casa.

Pero de inmediato, queda claro que Eddie (Adam Goldberg), es algo más que un chico en busca de un lugar en el que vivir. Desde su obsesión por los peces (vivos y muertos), hasta disecar frutas. El personaje termina por ser terrorífico, hasta que finalmente, Joey y Chandler unen fuerzas para hacerlo marchar. Dejando atrás uno de los capítulos más hilarantes de la serie. 

En el que nadie está listo (tercera temporada)

Este episodio será recordado por los fanáticos por ser una prueba a la paciencia. Mientras Ross (David Schwimmer) intenta que el grupo esté lista para un gran evento profesional, el resto parece poner especial interés en no estarlo. En particular, Joey y Chandler, que terminan en una discusión disparatada por su sitio en un mueble de la casa de Mónica (Courteney Cox).

Pero la cosa no termina allí. Todo se hace peor, cuando ambos deciden provocarse entre sí. Lo que termina con Joey llevando toda la ropa de Chandler — de la interior a las corbatas — puestas al mismo tiempo y mientras baila y realiza actividades gimnásticas en medio del salón. Para el neurótico Chandler fue más que suficiente para llegar al borde del colapso.

El de los embriones (cuarta temporada)

Phoebe (Lisa Kudrow) desea quedar embarazada para ser madre subrogada para su hermano recién conocido, de allí el nombre del capítulo. Pero mientras eso ocurre, Joey y Chandler, desafían a Rachel (Jennifer Aniston) y a Mónica a un torneo para demostrar quién conoce más a quién. El maestro de ceremonias, será Ross que, por supuesto, ya tenía todo lo necesario para llevar a cabo el juego. 

Todo parece un duelo parejo, hasta que llega la pregunta fatal: ¿Cuál es el trabajo de Chandler? No solo se celebra la vieja tradición del programa de desconocer del todo qué hace el personaje para vivir. También, da paso a uno de los grandes momentos de Chandler, cuando al triunfar, llega para reclamar su premio. El gran y cómodo departamento de Mónica, a cambio del estrecho de soltero que comparte con Joey. Para la historia, la imagen del personaje a bordo del perro de porcelana, entrando sobre ruedas al piso. 

El de Chandler en una caja (cuarta temporada)

La mayor prueba de la amistad entre Chandler y Joey, ocurrió cuando el personaje de Matthew Perry se enamoró de Kathy (Paget Brewster). Esta, era uno de los múltiples intereses romántico de su amigo, lo que llevó derecho por el camino de la traición. Lo que terminó con una pelea considerable entre ambos y al final, la amenaza de Joey de mudarse definitivamente del departamento que compartían.

En un intento desesperado por recuperar la amistad, Chandler se encierra en una caja, como castigo por deslealtad. Para satisfacer a Joey, debe quedarse callado al menos por una noche y demostrar que lo ocurrido, fue de gravedad. Pero Chandler no contaba que Kathy llegaría para despedirse de ambos. Puesto a elegir entre Joey y la chica de sus sueños, Chandler no pronuncia palabras, encerrado en la casa y solo atina a alzar un dedo por un agujero al decir adiós. 

Claro está, el capítulo termina con Joey perdonándolo todo, justo a tiempo para que Chandler pueda ir y recuperar a Kathy. 

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