Los asesinatos y quienes los cometen, siempre han sido motivo de una morbosa curiosidad colectiva. Algo que el género de crímenes reales o True Crime explora desde la convicción que la brutalidad y la crueldad, también son aspectos de la naturaleza humana. Sin duda, los más oscuros y temibles, pero, aun así, parte de la forma en que puede comprenderse la cultura y la sociedad contemporánea. Mucho más, a medida que los criminales, se convierten en motivo de interés público y una manera de cuestionar, la moral y la ética del individuo moderno.
Por supuesto, es un fenómeno que se refleja en la abundante cantidad de contenido, dedicado a la narración de delitos y la actuación criminal. El análisis detrás de los motivos al cometer asesinatos notorios, robos, estafas, manipulaciones con intenciones delictivas. La pantalla grande y pequeña, reflejan la obsesión por explorar los espacios más tétricos del comportamiento de hombres y mujeres, en apariencia comunes. En especial, sus intenciones, métodos y los que les impulsa a cometer hechos atroces.
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Te dejamos cinco series con argumentos del género True Crime, que recopilan varias de las historias más asombrosas del género. Parientes en busca de justicia, víctimas que dejan respuestas sobre las espantosas agresiones que sufrieron hasta estrategias de investigación. La selección es un recorrido a través de lugares inexplorados acerca de la violencia, la agresión y el miedo. Un recordatorio de los territorios tenebrosos que todavía esconde la mente humana.
Accident, Suicide or Murder
Con cuatro temporadas y 52 episodios, la docuserie explora todo tipo de circunstancias, que se encuentran en medio de la especulación judicial. Los episodios relatan a detalle un caso de muerte sospechosa. Pero hace hincapié en la posibilidad que la primera conclusión de la investigación, haya podido ser infructuosa o cometido un error. Por lo que el argumento, repasa todos los puntos claves. Por lo que apela al uso de entrevistas con familiares, amigos, expertos y detectives para analizar las teorías que rodean al delito en el cual se profundiza.
La producción se especializa en sucesos notorios y muertes controvertidas, incluyendo el caso de la modelo de Playboy, Dorothy Stratten, el de la activista política Sandra Bland, la estudiante Shane Todd, entre otros. Cada una de las circunstancias, coinciden en un único punto. No está del todo claro, qué pudo haber ocurrido. En el mejor de los casos, hay dudas razonables acerca de las primeras conclusiones en las diversas investigaciones.
Con su enfoque detallado y objetivo, la serie encuentra una forma de explorar en la idea sobre la culpabilidad y la responsabilidad delictiva, que evita los extremos. También, familiariza al público con los diversos procedimientos policiales y jurídicos. Lo que, sin duda, la convierte en una opción extraordinaria para los amantes del True Crime.
Murder, Mystery and My family
El primer capítulo de la producción, quedan claras sus intenciones. El argumento afirma que el sistema judicial inglés, es la envidia del mundo, pero que también, comete todo tipo de errores. Lo que lleva a la exploración de una premisa intrigante y terrorífica a la vez.
¿Cuántos de los acusados y ejecutados por crímenes durante buena parte de la historia británica, eran realmente culpables? Los abogados penales Jeremy Dein y Sasha Wass investigan casos históricos de asesinatos, para determinar si se produjo un error judicial en el juicio original.
Los capítulos permiten, además, realizar un recorrido por la forma de hacer justicia en un país conocido por la escrupulosidad de sus leyes. Algo que es cada vez más evidente, en la forma en que se analizan recursos — de transcripción, registro e incluso, conservación de pruebas — a lo largo y ancho de Inglaterra. Sin embargo, lo más interesante de la propuesta, es la intención de explorar con cuidado y desde la admisión de la posibilidad del error, todo tipo de situaciones. Lo cual convierte a la docuserie en una reflexión cuidadosa del concepto de justicia actual.
Como atrapé a mi asesino
¿Puede el cuerpo de una víctima ser el principal testigo del crimen que sufrió? La extraña premisa sostiene a este documental, que intenta demostrar que ningún indicio es pequeño al momento de resolver un asesinato. Mucho más, si tiene una relación directa con todo lo que rodea a la circunstancia como hecho legal. Se trata, además, de una exploración cuidadosa acerca de los procesos forenses y anatómicos, que permiten descubrir, incluso en los indicios más pequeños, pruebas contundentes.
Todos los episodios están construidos alrededor de un escenario básico. Cada cadáver contiene todo lo que la ciencia puede necesitar para descifrar el motivo de la muerte. Lo que permite al argumento explorar desde el protocolo de traslado de cuerpos hasta la forma en que los indicios son analizados bajo el cristal de la ciencia.
La serie también muestra cómo los detectives usan técnicas de investigación que varían de acuerdo al crimen. Lo que crea profundiza en la idea en que toda circunstancia criminal es única y merece atención especializada. Uno de los grandes logros de la trama y además, un mensaje directo acerca de la dedicación de profesionales de todo tipo en resolver los más terribles sucesos.
La desaparición de Morgan
Morgan Nick tenía seis años, cuando desapareció el 9 de junio de 1995. Lo más singular, es que la niña se encontraba a escasos metros del lugar en que estaba su madre. De hecho, la rodeaban docenas de adultos, que asistían a un partido de la Liga de Béisbol Infantil de Arkansas. Pero no solamente, no hay indicios de lo que pasó en su caso, sino que casi veinte años después, todavía no hay conclusiones sobre lo que pudo haber ocurrido.
En cuatro episodios, La desaparición de Morgan, no solo explora en la posibilidad que se hayan pasado por alto pruebas en la investigación original. También, analiza el hecho que una interpretación novedosa acerca de lo ocurrido, puede aportar una nueva perspectiva a lo sucedido con la pequeña. ¿Fue secuestrada? ¿La policía ignoró deliberadamente las declaraciones sobre un camión en la zona? Poco a poco, el docudrama, analiza cada posibilidad, hasta llegar a una conclusión. Todavía, no hay una respuesta clara del destino final de la víctima.
La producción abrió un amplio debate, acerca de la participación de los medios de comunicación en caos policiacos. A la vez, aportó indicios que, por ahora, mantienen el caso en medio de una revisión de pruebas. Todo un triunfo para el género de True Crimen.
Mi padre, el asesino del Zodiaco
¿Qué pasaría si al indagar en el pasado, cualquiera tropezara con la revelación más perturbadora posible? Eso fue precisamente lo que le ocurrió a Gary Stewart, quien descubre que su padre biológico, Earl Van Best Jr., podría haber sido un criminal. Aún peor: que todos los indicios indican que, quizás, se tratara del asesino en serie conocido como el Zodiaco.
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La trama analiza el hecho no solo a través del desconcierto de su protagonista y allegados, sino también, por medio de la perspectiva histórica de lo que podría significar su hallazgo. Abarca entrevistas a expertos en la ley y familiares de las víctimas del delincuente. El argumento también muestra la metódica investigación de Stewart mientras intenta descubrir un misterio que por años acechó a la sociedad norteamericana.