Mistral AI, una startup con sede en París y creada hace tan solo cuatro semanas, acaba de recibir una de las rondas de financiación inicial más grandes de toda Europa hasta el momento. La compañía, especializada en el desarrollo de modelos de inteligencia artificial, y que ha sido fundada por tres investigadores de IA que anteriormente trabajaban en Google y Meta, han recaudado 105 millones de euros con el objetivo de competir contra OpenAI y crear una alternativa a ChatGPT.

Uno de los principales inversores de MistralAI es Lightspeed Venture Partners, quien también ha colaborado con fondos en compañías como Snapchat o StabilityAI. Eric Schmidt, máximo responsable de Google desde 2001 hasta 2011, también ha invertido en Mistral AI, así como un empresario francés de telecomunicaciones y el banco de inversión Bpifrance.

La inversión de Mistral AI es, sin duda, una muy buena noticia para Europa. Sobre todo, teniendo en cuenta las preocupaciones entorno a modelos de IA como el de Google. De hecho, la Comisión de Protección de Datos de Irlanda ha dado marcha atrás en la intención de la compañía de Mountain View de desplegar Bard en Europa. Principalmente, porque no hay garantías por parte de Google para proteger los datos de los usuarios europeos.

El Parlamento Europeo, además, ha dado un paso más para aprobar la Ley de Inteligencia Artificial, que entrará en negociación próximamente.

Crear una alternativa europea a ChatGPT: el objetivo de Mistral AI

Móvil con la página principal de ChatGPT abierta sobre fondo con el logotipo de OpenAI.

Con esta inversión, y con tan solo un mes de vida, Mistral AI ya está valorada en 240 millones de euros. El objetivo de la empresa, reiteramos, es crear una alternativa europea a ChatGPT o Bard, modelos de lenguaje basados en inteligencia artificial. Financial Times afirma que el equipo ha comenzado a trabajar en su primer producto de IA hace unos días y esperan que se lance a principios del próximo año.

Mistral AI, en concreto, está fundada por Arthur Mensch, quien también es director ejecutivo de la startup y quien trabajó anteriormente como investigador en DeepMind, el laboratorio de IA de Google. Timothée Lacroix y Guillaume Lample, ex empleados de Meta y que también trabajaban en la división de inteligencia de la compañía, también son dos de los fundadores de Mistral AI.

El equipo, así como los socios inversores, se muestran optimistas ante el desarrollo de este modelo de lenguaje capaz de realizar tareas de IA generativa por la experiencia de sus fundadores. Aunque los inversores tienen en cuenta los que significa lanzar una nueva empresa de IA. “En este momento, para bien o para mal, los requisitos de capital en cómputo y talento de primer nivel hacen que sea un juego bastante intensivo en capital”, afirma Antoine Moyroud, portavoz de Lightspeed.