Los verificados llegaron para quedarse. Si bien esta característica ha estado disponible desde hace un tiempo en varias redes sociales, el fiasco de Twitter Blue la puso en boca de todos. Ahora es Gmail quien se sube al carro y anunció que desplegará una insignia azul en cuentas seleccionadas.
A diferencia de Twitter, Gmail no cobrará por añadir el check azul en los nombres de usuario. La tecnológica anunció que las insignias de verificado aparecerán en las cuentas que utilicen BIMI, un estándar que valida la autenticidad de los mensajes para evitar ataques de suplantación de identidad.
El BIMI (Indicadores de Marca para Identificar Mensajes), es una especificación que permite añadir un logotipo de marca a los mensajes autenticados provenientes del dominio del remitente. Para ello, la empresa debe activar la protección DMARC y verificar su imagen, que posteriormente se desplegará como avatar junto al nombre de usuario. Gmail tiene un listado con los pasos detallados que debes de seguir si quieres contar con esta funcionalidad.
Aunque la insignia azul de Gmail es nueva, el programa BIMI para verificar la autenticidad de las cuentas comenzó sus primeras pruebas en 2020. Un año más tarde se abrió a todas las cuentas de Google Workspace y G-Suite. La actualización de hoy es un paso adicional que busca evitar que los usuarios sean víctimas de ataques de spoofing.
"Sobre la base de esa característica, los usuarios ahora verán un icono de marca de verificación para los remitentes que han adoptado BIMI. Esto ayudará a los usuarios a identificar mensajes de remitentes legítimos frente a suplantadores."
Google
Los verificados de Gmail estarán disponibles a partir de hoy para todas las cuentas de Google Workspace y G-Suite. Lamentablemente, los usuarios con cuentas personales no podrán acceder a la insignia azul, solo visualizarla en su bandeja de entrada.
Verificados en Gmail: ¿ego o necesidad?
Hasta hace poco, las insignias azules de verificación en servicios como Twitter o Instagram estaban destinadas a personalidades o empresas. Esto cambió con la llegada de Elon Musk como dueño de Twitter, quien cambió las reglas del juego con el lanzamiento de Twitter Blue. La fiebre de los verificados generó que otras empresas se subieran al tren, aunque con Gmail las cosas son distintas.
La verificación en el correo electrónico tiene dos ejes de acción: evitar ataques de suplantación de identidad y asegurar que el mensaje no llegará a la bandeja de spam. Para que un remitente obtenga su insignia azul en Gmail deberá pasar las verificaciones de autenticación DMARC. Estas garantizan que no existe suplantación de dominio, previniendo los correos de phishing y spoofing.
Contrario a Twitter, la verificación de Gmail no servirá para alimentar el ego del remitente, sino para confirmar que es legítimo. La próxima vez que recibas un correo con la insignia azul estarás seguro de que se trata de Amazon y no de un scammer de la India que quiere robar tu clave de Prime Video.