El tercer episodio de la última temporada de Succession, de HBO y disponible en HBO Max, se considera ya uno de los grandes momentos de la historia de la televisión contemporánea.
La muerte de Logan Roy (Brian Cox), narrada a través de las reacciones de sus hijos, sorprendió a la crítica y al público. Con un guion cuidadoso que se centró en las emociones de los descendientes del cabeza de familia, el capítulo evitó confirmar lo ocurrido hasta su última escena. Convirtiendo el argumento en una serie de suposiciones e interpretaciones sobre algo que cambiaría radicalmente la historia.
El impacto se logró, en buena medida, porque el destino del personaje de Succession se convirtió en el secreto mejor guardado por la producción y el elenco. Así lo confirmó la productora y escritora Georgia Pritchett a través de Twitter. La ejecutiva explicó que mantener el secreto incluyó utilizar un código familiar en HBO que no levantara sospechas. Al mismo tiempo, que evitara que la importante información pudiera filtrarse de alguna manera al público.
Succesion solo está disponible en HBO Max
¡Este fue un secreto difícil de guardar! Lo decidimos en la sala de escritores de Succession el 22 de enero. Para que nadie se enterara, usamos un código en las pizarras. (La frase) ‘Larry David’ se refería a ‘Logan Muere’. Así que el episodio 403 decía ‘La boda de Connor, Larry David’. Eso sí, ese también habría sido un gran evento.
Georgia Pritchett
Sorprendió, en particular, que el sistema logró impedir que cualquier indicio sobre la muerte de Logan Roy en Succession trascendiera. A pesar de que, en el primer capítulo, el personaje deja entrever que se encuentra solo y tiene miedo a morir. Algo a lo que en la tercera entrega se hizo énfasis y que desató todo tipo de preguntas sobre la conclusión de la historia del personaje.
Todas las precauciones de la producción de Succession
Pero no solamente el equipo de guionistas fue cauteloso con la información. Como explicó el director Mark Mylod a Variety, se tomaron medidas para evitar que un observador casual pudiera sacar conclusiones de la ausencia del actor Brian Cox del set de Succession. Por lo que este último siguió filmando el programa tras la muerte de su personaje. Lo que significó que estuvo presente en el futuro funeral del patriarca de la familia Roy.
También, según explicó el realizador, el intérprete fue contratado para participar en escenas de Succession que luego se desecharían. Una maniobra que logró disimular lo que habría sido una notoria ausencia a lo largo del rodaje. Mark Mylod fue informado sobre el importante giro de trama por el creador Jesse Armstrong. Juntos planearon la estrategia a seguir y decidieron el enfoque del suceso de mayor importancia en la serie.
Ambos acordaron que se trataría desde puntos de vista poco comunes, con la narración enfocada directamente en la familia Roy y su comportamiento. Asimismo, en su dolor, angustia y desconcierto, lo que sería una forma por completo nueva de enfocar el conflicto familiar, centro de la trama en Succession.
Un hombre comprometido con su papel
Por otro lado, Brian Cox estuvo tan involucrado como el resto del elenco y los productores en proteger el hito más inesperado de la última temporada de Succession. No solo siguió acudiendo al rodaje cada día después de su muerte. Se aseguró de ser visible. Como contó a Deadline, su intención era dejarse ver por los posibles fotógrafos y observadores mientras transcurría la escena del funeral, parte de los próximos capítulos.
Por curioso que parezca, la única secuencia de toda la temporada en que el intérprete estuvo ausente fue la del fallecimiento de Logan. Explicó que el grupo de guionistas quería mantener una perspectiva que solo mostrara llamadas telefónicas y las reacciones de los hijos Roy.
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Por lo que el actor no estuvo presente en la escena de Succession a bordo del avión o ningún lugar aledaño. Solo regresó una vez que todo había ocurrido. Un método que permitió brindar mayor tensión a la narración y al dolor compartido de los protagonistas.