El próximo gran objetivo de la industria de los semiconductores son los chips de 2 nanómetros, y Japón quiere tener la ventaja. Por ello, IBM se alió con Rapidus, un consorcio nipón que se encargará de fabricarlos en tierras asiáticas.
Por supuesto que no se trata de un proyecto que busque dar frutos de la noche a la mañana. Aunque sí puede cambiar el panorama de un sector que hoy tiene gran parte de sus recursos concentrados en Taiwán, y más específicamente en TSMC. Y si Japón pretende dar el salto hacia los procesos más avanzados para la producción de chips, IBM parece ser el compañero ideal.
Recordemos que, en 2021, la compañía estadounidense creó los primeros chips de 2 nanómetros del mundo. Un avance notorio en materia de procesos litográficos, al lograr ubicar 50.000 millones de transistores en una superficie del tamaño de una uña. Además, la tecnología promete brindar un rendimiento 45% mejor al de procesadores actuales de 7 nanómetros, pero consumiendo un 75% menos de energía.
La alianza con Rapidus propone escalar la tecnología de IBM para que, antes de 2030, los chips de 2 nanómetros se fabriquen masivamente en Japón. Para lograrlo, científicos del consorcio japonés trabajarán en las instalaciones de la firma estadounidense tanto en Tokyo como en Albany, Nueva York.
"Esta es una colaboración internacional deseada desde hace mucho tiempo, verdaderamente esencial para que Japón vuelva a desempeñar un papel vital en la cadena de suministro de semiconductores. Confío plenamente en que esta colaboración allanará el camino para nuestro objetivo de contribuir al bienestar de la humanidad a través de semiconductores lógicos avanzados producidos con tecnologías desarrolladas conjuntamente con IBM".
Atsuyoshi Koike, presidente y CEO de Rapidus.
IBM y Japon unen fuerzas para producir en masa los chips de 2 nanómetros
Si bien IBM tiene la ventaja para desarrollar chips de 2 nanómetros, escalar su producción para llevarlos a dispositivos de uso masivo es otro cantar. En su momento, la firma estadounidense dijo que no alcanzaría su fabricación en volumen al menos hasta fines de 2024. Y si bien la alianza con Rapidus no necesariamente implicará una reducción en los tiempos, sí puede ayudar a simplificar su alcance e implementación.
Después de todo, Rapidus se formó a partir de la inversión de ocho compañías japonesas: Toyota, Sony, NTT, SoftBank, Kioxia, Denso, NEC y MUFG Bank. Esto significa que algunas de las empresas más importantes del mundo están apuntalando el esfuerzo nipón para dar el golpe y meterse de una vez por todas en la industria de los semiconductores, de la mano de los chips de 2 nanómetros.
Según un informe de su ministerio de industria, Japón se encuentra 10 años por detrás de sus competidores en la carrera por desarrollar chips de próxima generación. Y la alianza con IBM para producir chips de 2 nanómetros es vista como "la última oportunidad" de volver a entrar en la conversación, considerando que la nación asiática dominó el mercado en la década de 1980, pero perdió su lugar cuando emergieron las industrias de Taiwán y Corea del Sur.
Podría decirse que este es el segundo puntal de la estrategia japonesa para volver a ser un destacado desarrollador y fabricante de chips. A fines del año pasado se conoció que Sony se alió con TSMC para instalar una planta de semiconductores en la prefectura de Kumamoto. La misma funcionaría plenamente desde 2024 y produciría unas 45.000 obleas de 12 pulgadas por mes, utilizando procesos de 20 a 28 nanómetros.
Claramente, una tecnología que no se parece en nada a la de los chips de 2 nanómetros de IBM, pero que es más que suficiente para abastecer a las industrias automotrices y de electrónica de consumo. Y que también pretende combatir las posibles escaseces de semiconductores del futuro.