Malos tiempos para la carne vegana que nacía hace unos años para ocupar el lugar de la industria cárnica tradicional. Beyond Meat, una de las pioneras en crear hamburguesas 100 % vegetales, pasa por un mal momento. Si la parte económica no fuera suficiente, una que tampoco es benévola con el resto de compañías del sector, ahora la multinacional se enfrenta a un problema de imagen. Adelantado por Bloomberg con información de empleados de la compañía, se han podido ver varias imágenes en las que una de las fábricas de empaquetado de Beyond Meat estaría infectada por el moho y las bacterias.
Según adelantan desde el medio norteamericano, la fábrica de empaquetado de Beyond Meat situada en Pensilvania habría estado manteniendo sus problemas de salubridad durante varios años. Si bien la compañía apunta a que las inspecciones de sanidad habrían sido constantes por parte de las autoridades sanitarias locales. Unas inspecciones que se ha sabido que fueron limitadas, lo que quiere decir que los inspectores no accediesen a las zonas contaminadas en cuestión. En cualquier caso, las imágenes –corroboradas por otros trabajadores– apuntan a moho creciendo por las paredes, cajas de productos para cocinar y contenedores.
Asimismo, también se aportaron varias pruebas de productos contaminados. Concretamente por listeria, una bacteria común en la industria cárnica que, de estar presente en alimentos crudos, puede terminar en intoxicación alimentaria. Según los informes, habría hasta 56 pruebas de contaminación entre 2021 y 2022. También casos de productos fuera de fecha, así como hilos o plásticos dentro de los alimentos.
No fueron los únicos en cualquier caso. Beyond Meat ya se habría enfrentado a casos de contaminación cruzada en varias ocasiones, rastreados en la región de Canadá este mismo año y obligando a retirar varios de sus productos de los lineales. En ese caso, se encontraron trozos de madera dentro de los paquetes de la carne vegana de Beyond Meat.
De forma paralela, los habitantes cercanos a la planta de Beyond Meat en Pensilvania también habrían manifestado sus quejas. Los malos olores y los ruidos serían constantes en la fábrica de empaquetado de carne de mentira.
Beyond Meat: problemas en las fábricas y con los inversores
El auge de las compañías de carne vegana o vegetal entendida bajo el concepto de startup al más puro estilo de Silicon Valley tenía sentido en el momento en el que empezaron. La llamada ansiedad ambiental y el auge de nuevos modelos de alimentación crearon el caldo de cultivo idóneo. Se suma la mala prensa que la industria ganadera venía gestando con sus malos datos medioambientales: son causantes de más de 14 % de las emisiones de CO₂. Y todos sabemos que donde hay un problema y hay público, hay una startup e inversores dispuestos a sacar provecho.
Dicho y hecho, junto a Beyond Meat surgieron todo un grupo de compañías con diferentes apuestas y propuestas. Desde la carne cultivada en laboratorio –aún pendiente de recibir el visto bueno de las agencias correspondientes–, hasta las que imitaban la carne el color y sabor partiendo de productos vegetales. Oatly, Impossible Foods, en España Heura, Nova Meat o Perdue, entre otras muchas, nacieron bajo el ala de la nueva industria de la alimentación.
El problema es que todo lo que sube, tiende a bajar. Y en el ecosistema de las empresas tecnológicas la tendencia ahora es a la baja. El grifo de la inversión cerrado, la incertidumbre económica en pleno apogeo y el incremento de los costes de explotación también está pasando de cerca a todo este ecosistema. De media, la nueva industria alimenticia se ha dejado un 51 % de su valor en bolsa durante el último año. Un 36 % si tenemos en cuenta los dos últimos años. Beyond Meat supera la apuesta y baja hasta el 80 %. Si bien es cierto que la industria tradicional ha caído un 12 % el último año y un 7 % en los dos últimos, la tendencia de los nuevos modelos de negocio sigue ganando en pérdidas.
Nunca lograron convencer a los carnívoros
Beyond Meat era la punta de lanza de algo que terminó por contagiar al resto de compañías. La tecnológica de carne vegetal, que había logrado 122 millones de dólares en 12 rondas de financiación, había tocado el cielo bursátil en los tres años en los que lleva cotizando. De pasar de los 239 dólares por acción que llegó a alcanzar, las últimas semanas han sido una catástrofe para la compañía rozando los 15 dólares. En cuestión de semanas, el hito del mercado vegetal ha perdido el visto bueno de los inversores con unos resultados que no terminan de convencer.
El motivo más simple es que, al igual que ocurre en otros sectores, la burbuja está rompiéndose. Es cierto que ante la emergencia climática se han instalado nuevos hábitos alimenticios. Pero la realidad es que el efecto masivo de la carne vegetal como la de Beyond Meat no ha sido tan fuerte como se esperaba.
El impulso inicial vino acompañado por fuertes campañas de marketing, una que incluso se asoció con Burger King. El problema es que esto no pasó de ser una anécdota y no logró su objetivo: ser un sustituto verdadero. A los veganos y vegetarianos ya los tenían convencidos, pero el público masivo –el carnívoro– nunca lo puso como una opción viable. Solo fue un entretenimiento temporal al que, además, no le acompañaba el precio. De media más cara que la odiada carne real.