Lufthansa ha prohibido, aparentemente, llevar una AirTag en las maletas facturadas. En una serie de posts en redes sociales, sin que haya mediado un comunicado oficial, la aerolínea prohíbe llevar estos dispositivos de rastreo en la bodega del avión. Según la compañía, lo único que están haciendo es cumplir con la normativa de seguridad aérea respecto a las baterías y radiotransmisores, pero no parece que esa sea la razón real.

Más bien, todo parece indicar que las AirTag están poniendo en especial aprieto a las aerolíneas, sacando a la luz sus vergüenzas con los equipajes que aparecen y desaparecen, que se pierden, o que no llegan a su destino... localizándose en un almacén incorrecto o en el propio aeropuerto de destino.

Lógicamente, los usuarios no se creen que tenga que ver con la regulación aérea, y han presionado a la aerolínea en redes sociales, que sigue insistiendo que todo tiene que ver con la seguridad de sus vuelos. Según Lufthansa, única razón por la que están prohibiendo las AirTag es por cumplir con la regulación de las mercancías peligrosas a bordo:

"De acuerdo con las pautas de la OACI, los rastreadores de equipaje están sujetos a las regulaciones de mercancías peligrosas. Además, debido a su función de transmisión, los rastreadores deben desactivarse durante el vuelo si están en el equipaje facturado y no pueden ser usados como resultado de ello".

Las AirTag han puesto al descubierto las vergüenzas de las aerolíneas con nuestro equipaje

El problema principal es que los AirTag en realidad, no entran dentro de esa categoría. No son, per se, una mercancía peligrosa. Y la regulación a la que se refiere la aerolínea está enfocada, específicamente, a las baterías de iones de litio, como las que se utilizan en dispositivos más grandes como un MacBook o dispositivos pequeños como los cigarros electrónicos.

Las AirTag no usan una batería grande de iones de litio, sino una pila tipo CR2032 de 3 V, que es demasiado pequeña para ser considerada un problema según la regulación de mercancías peligrosas.

Las AirTag no usan baterías grandes de iones de litio

Las pilas CR2032 no son baterías de iones de litio y, como tales, no están cubiertas por la regulación. Si las celdas CR2032 fueran de hecho un peligro, los relojes que usan el mismo CR2032 no estarían permitidos en los vuelos. Además, respecto a sus capacidades de trasmisión, las AirTags son transmisores de baja potencia, y no hay suficiente potencia para interferir con los sistemas de los aviones comerciales. Es más, incluso con el modo avión, muchos dispositivos no desactivan el Bluetooth.

La excusa de Lufthansa es bastante peregrina. De hecho, en algunas de las regulaciones más exhaustivas, como la de Estados Unidos, la TSA permite que rastreadores como AirTags vayan el equipaje de mano y facturado. Por otro lado, la FAA también las permite, debido a los efectos limitados de las transmisiones de Bluetooth de corto alcance en su potencial interferencia con los instrumentos.

Ni la TSA, ni FAA ni el aeropuerto de Berlín prohiben su uso

En Alemania, país de Lufthansa, tampoco parecen muy preocupados por este asunto. La prensa alemana, haciéndose eco de la prohibición, preguntaron a los responsables del aeropuerto de Berlín, confirmando que no existe tal prohibición en los vuelos para las AirTag:

"No tenemos una prohibición de AirTags en el equipaje facturado, ni existen requisitos para ellas. En este sentido, los airtags no se eliminan del equipaje."

Parece que, después de todo, la única razón aparente por la que Lufthansa quiere prohibir la AirTag es que para que los usuarios sigan sin ser consciente de lo que pasa con su equipaje. Porque la excusa de que "el sistema está caído y no puedo localizar tu maleta" no cuela desde que las AirTag están vigilantes.