Los avances a pasos agigantados de la industria aeronáutica durante el siglo XX, especialmente en el orden militar, no solo nos han permitido conocer a algunos de los bombarderos y aviones de combate más espectaculares de la historia. También permitieron redefinir el uso de helicópteros en escenarios de conflicto, y uno de los casos más notorios ha sido el del AH-64 Apache.

Hablamos del que posiblemente sea el helicóptero de ataque más famoso de la historia, y uno de los de uso militar más reconocibles junto al Sikorsky UH-60 Black Hawk. Desarrollado en los años setenta, el AH-64 Apache ha destacado no solo por su desempeño, maniobrabilidad y poder de fuego, sino también por sus innovaciones tecnológicas.

Desde su introducción en servicio con el Ejército de Estados Unidos, en 1986, ha sido regularmente actualizado para sumar más tecnología. Esto ha derivado en la creación de variantes modernizadas que también han sido exportadas a otros países, siendo la más conocida la AH-64D Apache Longbow.

Más allá de su diseño, capacidad tecnológica y armamentística, una característica muy peculiar del Apache es que ha sido fabricado por tres empresas diferentes. El proyecto original fue de Hughes Helicopters, pero dicha compañía fue posteriormente adquirida por McDonell Douglas, que se hizo cargo de su producción. Tras la fusión entre MD y Boeing en 1997, esta última absorbió la continuidad de su desarrollo.

Como dato de color, el AH-64 Apache cuenta con una versión alternativa fabricada bajo licencia por AgustaWestland en el Reino Unido. Dicho helicóptero de ataque, operado por el Ejército Británico, mantiene las características de la variante estadounidense —más específicamente, del AH-64D Apache Longbow—, aunque con algunos cambios notorios. Entre ellos, distintos motores y sistemas electrónicos de defensa, y un mecanismo que permite plegar las aspas para utilizarlo desde barcos.

AH-64 Apache, un helicóptero de ataque revolucionario

Fotos: US Army (Flickr).

Los orígenes de AH-64 Apache se remontan a fines de 1972, cuando el Ejército de Estados Unidos lanzó las solicitudes de propuesta para la creación de un helicóptero de ataque avanzado. El objetivo era reemplazar al Bell AH-1 Cobra que había entrado en servicio a fines de los sesenta, durante la guerra de Vietnam. Así las cosas, Hughes Helicopters fue una de las cinco compañías que participaron del concurso y su proyecto se erigió como ganador.

Los primeros Apache llegaron a manos del Ejército estadounidense en 1981, aunque entraron en servicio recién en abril de 1986. Desde entonces, se ha convertido en una de las aeronaves insignia de las fuerzas armadas norteamericanas. No solo por su letalidad, sino también por su diseño tan intimidante y reconocible.

El AH-64 Apache se destaca por su fuselaje angosto, diseñado para ofrecer la menor superficie de ataque posible al enemigo. Su característica cabina ubica a los tripulantes en tándem: al frente, el artillero, y detrás —y ligeramente elevado—, el piloto. Un dato característico de este helicóptero de ataque es que cualquiera de los ocupantes tiene la posibilidad de volarlo y controlar las armas. Además, las dos ubicaciones están separadas por un cristal para tratar de maximizar las posibilidades de supervivencia de al menos uno de los tripulantes.

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En lo que respecta a armamento, el Apache presume un poder de fuego impactante. Incorpora un cañón automático de 30 milímetros M230, con capacidad para 1.200 municiones, además de cuatro puntos de anclaje que permiten una amplia variedad de combinaciones de cohetes y misiles. El AH-64 es capaz de transportar cohetes aire-superficie de 70 milímetros Hydra, CRV7 y APKWS; así como misiles aire-aire tales como los AGM-65 Maverick y AIM-92 Stinger, entre otros.

Las variantes AH-64D Apache Longbow y AH-64E Guardian también destacan por integrar un radar de control de tiro en un compartimiento con forma de domo. El mismo se ubica en el extremo superior del rotor principal, junto a un interferómetro de radiofrecuencia. Según se reporta, su instrumental le permite rastrear 128 blancos en simultáneo, y atacar hasta a 16 de una sola vez. No obstante, también existen reportes de que la capacidad real del equipamiento es muy superior.

También es capaz de soportar fuego enemigo

AH-64 Apache
Foto: US Army (Flickr).

El AH-64 Apache no solo destaca por el castigo que puede infligir con su armamento, sino también por su capacidad de soportar el fuego enemigo. El habitáculo de los tripulantes se ha diseñado especialmente para resistir disparos de municiones de 23 milímetros, al igual que las aspas del rotor.

Pero eso no es todo. Como hemos visto en aviones de ataque a tierra como el A-10 Warthog, este helicóptero incorpora un fuselaje reforzado con más de 1.000 kilogramos de material blindado. En tanto que su depósito de combustible cuenta con un sistema de "autosellado" que impide las pérdidas en caso de perforaciones de bala, o en situaciones de fallos extremos que pueden derivar en un incendio o una explosión, como en un aterrizaje forzoso.

El AH-64 Apache también incorpora contramedidas en caso de quedar bajo ataque. Entre ellas, bengalas para disuadir misiles buscadores de calor.

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Un helicóptero cargado de tecnología

Uno de los puntos que ha vuelto tan notorio al AH-64 Apache desde su aparición en escena ha sido la incorporación de tecnología de punta. En tal sentido, ha destacado la incorporación de un sistema de pantalla integrada en el casco del piloto y el artillero. El mismo consiste de un visor especial con forma de tubo, que se encuentra cableado al resto del instrumental de la aeronave.

En el morro del helicóptero se encuentran las cámaras infrarrojas y de vídeo a color, así como otros sensores destinados a la identificación de objetivos, y el sistema de visión nocturna. Un dato característico es que estos equipos se pueden emparejar a los cascos de los tripulantes para que sigan los movimientos de sus cabezas.

AH-64 Apache
Foto: Wikimedia Commons.

Por otra parte, la variante AH-64E Guardian tiene la capacidad de controlar drones, así como recibir vídeo en directo desde ellos, para posteriormente retransmitirlo a los sistemas en tierra. Y la idea de Boeing es continuar iterando sobre esta plataforma para adaptarla a las necesidades del futuro.

Recientemente, la firma de Seattle anunció sus planes para modernizar el Apache, y aseguró que se debe optimizar "para complementar las plataformas de próxima generación en el ecosistema de despegue vertical futuro".

"Combinando un diseño probado en batalla con tecnologías transformacionales, el Apache modernizado llevará la capacidad de operaciones multidominio del modelo E al siguiente nivel mediante el uso de una red troncal digital, un programa para mejorar su motorización, y un enfoque de sistemas abiertos modulares para ofrecer una combinación inigualable de rendimiento y versatilidad, para complementar e interoperar con plataformas actuales y futuras".

Boeing sobre sus planes para el Apache modernizado.

Desde su introducción, el AH-64 Apache se ha posicionado como el helicóptero polivalente de combate más avanzado jamás adoptado por sus demás operadores. Hasta la fecha se han producido más de 2.500 unidades de la aeronave, con unas 500 destinadas para exportación. Solo a las órdenes del Ejército estadounidense, acumula 4,8 millones de horas de vuelo, de las cuales 1,3 millones han sido en misiones de combate.

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