Por más esfuerzo que han puesto las Kardashian en proteger el legado de Instagram, parece que Adam Mosseri sigue en su lucha por convertir a su red social en TikTok. Después de un controversial cambio en su diseño, así como también un enfoque más agresivo hacia los Reels, el jefe de Instagram confirma que la compañía comenzará a probar un nuevo formato de fotos.

Se trata de las fotos "ultra altas", un formato con una relación de aspecto de 16:9, exactamente el mismo que encontramos en las Historias, Reels y TikToks. De esta forma, Instagram planea expandir su clásico formato de 4:5, y adaptar su aplicación cada vez más a un formato de consumo vertical y a pantalla completa.

Imagen de Thomas Fitzgerald donde se muestra la nueva interfaz

Así lo confirmó el ejecutivo durante una de sus sesiones de Ask Me Anything (Pregúntame cualquier cosa). En ella, aseguraba que "dentro de una semana o dos" la compañía comenzaría a probar la nueva función dentro de Instagram. Según Mosseri, aprovechando que ya contamos con vídeos altos en la red social, creen que "deberíamos asegurarnos de tratar a ambos de igual forma". Por esto, harían una expansión en el formato de publicación de sus imágenes.

Pero esto no es todo. En caso de subir una foto que no se encuentre en este formato, Instagram agregará un gradiente en la zona superior e inferior de la misma. Así, planean imitar una foto más larga, pero sin afectar a la composición original.

Instagram y su eterna búsqueda de una personalidad

Instagram y TikTok

Tener más opciones a la hora de subir una foto a Instagram no es algo malo. Después de todo, no nos gusta recordar aquellos días en los que solo podíamos publicar con una relación de 1:1. No obstante, está bastante claro que la compañía no lo está haciendo solo para dar más herramientas a sus usuarios.

Después de todo, aunque Mosseri asegure que quieren dar la misma prioridad a las fotos y vídeos, sabemos que no es así. La compañía ya ha dejado bastante claro en reiteradas ocasiones que los Reels son el futuro, y parece que es uno inevitable.

A pesar de que los datos recolectados por Instagram demostraron la aversión de sus usuarios por el nuevo diseño, tanto así que incluso dejaron de usar la app por más tiempo, parece que los planes siguen adelante. Ya veremos cómo se las arreglan para poner las cosas en orden dentro de sus oficinas, y cómo terminará reflejándose en la red social favorita de miles de millones de personas.