Dijeron que después del verano llegarían las vacas flacas. Algunos no van a llegar a traspasar el umbral de agosto. Es el caso de las compañías de envíos de última milla ultrarrápidos. La historia que comenzó con el polémico cierre de Gorillas en España y los despidos masivos a nivel internacional, que siguió con Getir recortando personal, ahora va a por el tercero en discordia. GoPuff, que de todas las compañías del momento era la que mejores cifras de financiación manejaba, ya está haciendo las maletas para abandonar España. Por supuesto, despidiendo a su plantilla en la región.

Según adelanta Business Insider, la compañía ha iniciado el despido colectivo de 188 empleados en España. Un proceso que se llevaría por delante a todo el equipo de la región con especial incidencia en la división de los riders de la compañía. Son consecuencia de una estrategia global. En marzo anunciaba que despedía al 3 % de la plantilla –400 empleados. Hace solo unos días, al 10 % – lo que supone 1.500 empleados–, así como el anuncio del cierre del 12 % de los almacenes mundiales. También una recomposición de sus geografías. Al igual que otras empresas del sector delivery, Reino Unido sigue siendo el país más atractivo para operar, por lo que muchas han decidido replegarse en la zona. También GoPuff.

No son los únicos, en cualquier caso. Con Gorillas fuera de juego, Getir y GoPuff podían repartirse la complicada tarta de las entregas de última milla ultrarrápida. Pero a unos días de que Gorillas hiciese su polémico anuncio, Getir también soltaba lastre dejando zonas sin operaciones. A ojos del mundo, parecía que era una lucha de contención para ver quién era el primero en asumir que el negocio no era rentable en España.

Si en mayo anunciaban el recorte del 14 % de la plantilla, hace unos días volvía a las andadas. Iniciaban un despido de 35 empleados y el cierre de 20 de sus tiendas. Los casi 700 millones levantados en su ronda de marzo de 2022 tenían que racionarse ante una época de vacas flacas.

¿La Buena noticia? Con GoPuff y Gorillas fuera del mapa, Getir puede salvar los muebles y pasar el bache económico de los próximos meses.

España le salió cara a la empresa de última milla

Gopufff

GoPuff tiene un histórico envidiable de rondas de financiación. 4.800 millones de euros en solo 6 años. Es, con diferencia, la empresa de última milla ultrarrápida mejor financiada. También la que pude haber quemado más dinero. Es el caso de su entrada en España, con la necesidad de competir sin partir de cero, GoPuff entró vía adquisición. Por un precio estimado de 37 millones de euros, la compañía se hacía con todo el negocio de Dija –compañía catalana del sector delivery–.

Desde entonces llevan operando en España, no sin ciertas polémicas. Los empleados, ahora mismo unidos para evitar el cierre de GoPuff y, por lo tanto, sus despidos masivos, se han unido a fin de buscar otros caminos viables para las partes.

También, y a través de su cuenta de Twitter @Gopuffenlucha denuncian las condiciones de trabajo. Bajos sueldos, horas no pagadas, accidentes laborales y condiciones de trabajo que no se ajustan a la regulación.

GoPuff solo es una más

La recesión en puertas, que está previsto que impacte con toda su fuerza a finales de 2022, anunciaba malos tiempos para la economía. También para un sector tecnológico que había estado disfrutando de grandes rondas de financiación –y pocos ingresos– desde hacía tiempo. Ahora la situación ha cambiado y el negocio debe basarse en los réditos propios. Sumado a la inflación, la crisis energética y de componentes, el panorama se pone complicado para muchas compañías.

El delivery, que depende de los precios de productos de consumo y el interés del gasto por los clientes, juega en una liga altamente peligrosa en este momento. Glovo, Uber Eats, Just Eat y el conjunto de compañías de entrega de última milla ultrarrápida, como GoPuff, están viendo bajar todo lo que habían logrado durante la pandemia.

Con este panorama, la palabra despido ha sonado fuerte en el mundo tecnológico. Algo que no había ocurrido antes en un sector que lleva años pugnando por el mejor talento a golpe de talonario. Facebook ya apunta a que "muchos de sus empleados no deberían estar ahí". Microsoft, Amazon, Google, Tesla o Twitter ya han avisado de que residen ofertas de empleo e iniciarán reestructuraciones masivas. La última de ellas, Robinhood que acaba de anunciar el despido del 23 % de la plantilla, que se suma al 9 % de hace unos meses. Casi 2.400 empleados que la compañía de inversiones ha dejado sin trabajo.

Son malos tiempos para el sector, y más si es delivery.