Hacía tiempo que se les venía esperando. Con Cabify –operando desde hace tiempo con su modelo VTC– y el aterrizaje de la internacional Bolt hace solo unos días, Uber faltaba en la lista de las tecnológicas de movilidad que se atrevían a sortear la normativa catalana. Ahora ya es una realidad.

Según ha podido adelantar La Vanguardia, Uber acaba de aterrizar en Barcelona con el modelo de negocio que más urticaria le ocasiona al sector del taxi en la región. Con 200 licencias VTC, según ha confirmado Hipertextual con la compañía, que ya están operativas. También con el modelo que ya lanzaba Cabify hace unos años: el que sorteaba la obligatoriedad de reservar los trayectos con anterioridad. El unicornio español ya lanzaba un modelo en el que los usuarios se convertían en una suerte de "socios" de la plataforma. De esta manera, los términos y condiciones solo eran válidos para el primer trayecto del "contrato", dejando el resto sin la necesidad de tener que esperar el tiempo de 15 minutos de media previos.

Esta medida, muy polémica en su momento, ha terminado por ser imitada por el resto de compañías del sector. Con todo, Uber sigue el modelo de sus antecesoras: "Entramos con el mismo modelo de Cabify y Bolt", apuntan fuentes de la compañía. Uno igual al de Madrid.

A partir de hoy, en Barcelona, está disponible el modelo de transporte de UberX, Uber Van y Uber Comfort. Los 3 más frecuentas para la compañía a nivel nacional e internacional.

Y, pese a que era algo que se estaba esperando desde hace tiempo, pilla por sorpresa para el sector de la movilidad. Uber volvía a Barcelona, con un modelo para taxis parejo al que opera FreeNow, hace solo unos meses. Concretamente en marzo de ese mismo año y no sin polémica. Según apuntaban las gremiales del taxi, la multinacional aún no tenía el visto bueno para operar con la tarifa 3 (o de precontratación), por lo que su entrada en Barcelona era ilícita. Finalmente, Uber obtuvo el visto bueno de la AMB.Para esta ocasión, y según confirma la AMB a Hipertextual, tampoco se ha recibido ningún aviso por parte de la tecnológica. Pero en ese momento, la compañía apuntaba a que sus esfuerzos estaban centrados en operar con el modelo público. Dejaban a un lado, no obstante, el negocio de las VTC en Barcelona. Poco les ha durado la apuesta.

Uber llega justo antes de la reforma de las licencias VTC

Este movimiento por parte de Uber en Barcelona pone la primera piedra a delantarse a lo que tenga que venir en los próximos meses. La conocida como Ley Ábalos, la misma que regulaba la gestión de las licencias VTC a nivel nacional, está a punto de caducar. Concretamente el próximo 1 de octubre de 2022.

Madrid, lugar en el que las operaciones con coches VTC han tomado un mayor protagonismo con el visto bueno de las administraciones públicas, ya hay una reforma de carácter continuista. Básicamente, se podrá seguir circulando como hasta la fecha, sin ninguna restricción. Sobre la mesa quedaba pendiente la decisión que se tomase en Cataluña y, concretamente, en Barcelona. Lugar muy restrictivo con la actividad de los modelos de negocio de movilidad VTC. Y ha sido precisamente hoy cuando se ha dado el primer paso a la reforma de lo que fuese la Ley Ábalos.

Sin una decisión aún sobre la mesa que haga intuir por dónde irán los tiros en lo que a VTC respecta en Barcelona, hoy se ha podido saber que ya se están sentando las bases para un acuerdo parlamentario entre el Govern de la Generalitat y el Partido Socialista de Catalunya para aprobar un decreto que regule a las VTC después del 1 de octubre del 2022. Uno que, ya apuntan, castigará durante el incumplimiento de las normas vigentes.