España continúa avanzando en una ley que permita regular el uso de las Loot Boxes (o cajas de recompensas), presentes en una gran variedad de videojuegos. El Ministerio de Consumo ha publicado el primer borrador del anteproyecto de Ley con algunas de las principales medidas y prohibiciones para garantizar la salud de los jugadores más vulnerables. Entre ellas, el uso de estos elementos a menores de 18 años, así como la prohibición de publicidad a excepción de una franja horaria.
La regulación, en concreto, se aplica exclusivamente a aquellos Mecanismos Aleatorios de Recompensa (MAR) o 'Loot Boxes' que funcionen mediante el intercambio de elementos aleatorios por dinero —ya sea a través monedas oficiales o mediante activos digitales, como criptomonedas o, incluso NFTs—, y que estén presentes en videojuegos, webs o plataformas de terceros. Destaca, reiteramos, por la prohibición a los menores de 18 años, pues para adquirir una deberán verificar su edad a través de diferentes métodos, como la identificación a través DNI o algún sistema de reconocimiento biométrico.
En paralelo, aquellos mayores de edad que lo deseen podrán limitar el gasto relacionado con la compra de las Loot boxes estableciendo, por ejemplo, tiempos de uso o un importe máximo que deseen gastar en estos mecanismos. Las firmas de videojuegos, por tanto, deberán ofrecer una opción de estas características en sus títulos.
España también prohibirá la publicidad relacionada con las Loot Boxes
Las compañías desarrolladoras de videojuegos, además, no podrán hacer publicidad de estos elementos en diferentes situaciones. Entre ellas, cuando esta sea física o presencial, como vallas publicitarias, prensa escrita, etc. Tampoco podrán promocionar las Loot Boxes en aquellas webs o redes sociales que no estén relacionadas con los videojuegos. Sí podrán hacerlo en medios audiovisuales, como radio o televisión, pero únicamente en una franja horaria de 01:00 a 05:00 de la madrugada.
Por último, las compañías también deberán ser transparentes sobre el nivel de probabilidades de obtener elementos aleatorios en las llamadas Loot Boxes. En cualquier caso, aquellas que no cumplan estas obligaciones serán sancionadas con hasta 25.000 euros si de una infracción leve, de 25.000 a 2000.000 euros si es una grave y de 2000.0000 a 3 millones de euros para infracciones muy graves. Llegando, incluso, a clausurar los servicios que permitan el uso de las cajas de botón.
Por el momento, el anteproyecto de Ley se encuentra en una fase de audiencia pública, donde hasta el próximo 23 de julio podrán presentarse nuevas propuestas. Más adelante, el texto pasará por el Consejo de ministros, donde se aprobará la medida para que así inicie, a modo de proyecto de Ley, su tramitación en las Cortes.