Como cada año, la protagonista de los eventos astronómicos de abril será la lluvia de estrellas de las líridas. No obstante, también disfrutaremos de un eclipse solar parcial que no se verá en todo el planeta, pero seguro que dejará imágenes perfectas para que quienes no se encontraran en el lugar adecuado puedan disfrutarlo.
Todo esto ocurrirá en plena primavera en el hemisferio norte y otoño en el sur. Es decir, con un tiempo suave que permitirá salir a disfrutar de los cielos nocturnos sin excesivo abrigo. Un poco más abrigados por debajo del ecuador, sí, pero nada que ver con el duro invierno.
Y si no llegamos a tiempo de ver el pico de las líridas o no nos encontramos en uno de los lugares en los que podrá verse el eclipse solar tampoco pasa nada. Como cada mes, las noches de Luna llena, las conjunciones planetarias o el momentos de máxima elongación de Mercurio también nos regalarán escenas maravillosas en el firmamento. Por lo tanto, si te gustan los eventos astronómicos, saca tu agenda y anota las siguientes fechas.
Luna nueva: cielos oscuros para disfrutar del firmamento
Las noches de Luna nueva son perfectas para disfrutar del cielo nocturno, pues la luz del satélite no entorpece la observación de los objetos más débiles.
En los eventos astronómicos de este mes de abril tendremos dos noches de Luna nueva, una el 1 de abril y otra el día 30. Por lo tanto, abrimos y cerramos el mes con cielos oscuros.
Algunas conjunciones de estos eventos astronómicos
Los amantes de la astrofotografía son quienes más disfrutan de las conjunciones planetarias. No es para menos, pues estos eventos astronómicos representan escenas dignas de inmortalizar. Habrá muchas, como todos los meses, pero no podemos dejar de ver la de Saturno y Marte el día 5, la de Júpiter y Neptuno el 12 y la de Mercurio y Urano el 18. También habrá una conjunción entre la Luna y Saturno el 24 de abril y otra en la que la Luna y Marte posarán juntos el 26 de abril. Además, Venus se encontrará con la Luna el día 27 de abril y con Júpiter el día 30. Por otro lado, el primer día del mes tendrá lugar la ocultación lunar de Urano.
Las líridas, una de las reinas de las lluvias de estrellas
Las líridas no son de las lluvias de estrellas más intensas. Sin embargo, quizás por la época del año en la que ocurren, son de las más disfrutadas. Cuenta con unos 20 meteoros por hora.
Procede de los fragmentos de polvo que deja anualmente el cometa C/1861 G1 Thatcher y se podrá ver del 16 al 25 de abril. No obstante, su pico ocurrirá la noche del 22 al 23. En ese momento la Luna se encontrará en fase gibosa menguante, por lo que su brillo podría ocultar alguno de los meteoros de esta lluvia de estrellas. No obstante, gracias a que es común que dejen un bonito rastro brillante, seguro que con suficiente paciencia estos eventos astronómicos no defraudan a nadie.
La Luna llena rosa que no es rosa
Este mes la Luna llena tendrá lugar el 16 de abril. Como ocurre casi todos los meses, cuenta con un nombre procedente del folclore de las antiguas tribus indígenas de América del Norte. En este caso se la conoce como Luna rosa porque coincidía con el florecimiento de los campos de Phlox subulata, una planta perenne de flores rosadas que eran muy apreciadas entre los nativos americanos por sus supuestos usos medicinales.
No obstante, las tribus costeras la conocían también como Luna de los peces, porque justo cuando aparecía los sábalos (Prochilodus lineatus) nadaban río arriba para desovar.
Más eventos astronómicos de abril: Mercurio en su máxima elongación oriental
El mejor momento para ver Mercurio en estos eventos astronómicos será el 29 de abril, pues se encontrará en su punto más alto sobre el horizonte justo después de la puesta de Sol.
Un eclipse solar para acabar el mes
El 30 de abril tendrá lugar un eclipse solar parcial. Es decir, la Luna cubrirá solo una parte del Sol, por lo que podría verse casi como un mordisco a una galleta. Solo se verá en la mayor parte del sureste del Océano Pacífico y el sur de América del Sur. Especialmente tendrá muy buena visibilidad en Argentina, donde la cobertura llegará a ser del 53%. En estos puntos podrán verlo simplemente mirando al Sol, pero siempre usando unas gafas con un filtro adecuado. No valen unas gafas de Sol normales ni trucos clásicos como una radiografía. Puede ser muy dañino para la vista, así que lo mejor es no jugársela.
Si no tenemos gafas o estamos más al norte, siempre nos quedarán las fotos. Porque podemos estar seguros de que las habrá. Y seguro que serán maravillosas.