Apple ha anunciado este martes en su habitual evento de primavera la última evolución de su familia de procesadores para Mac: el M1 Ultra. Este chip parte de la misma arquitectura que el M1 original, pero ofrece hasta 8 veces más rendimiento que éste y el doble que el M1 Max.
Para "hacer" un M1 Ultra, la compañía decidió hacer que dos procesadores M1 Max trabajasen a la vez. De buenas a primeras, esto suele traer desventajas: cuando se hace algo así, de forma tradicional, en una placa, éstos han de comunicarse entre ellos para repartirse la tarea y resulta en un proceso ineficiente.
Además, unir dos procesadores no te da el doble de rendimiento, pero sí el doble de consumo. Tampoco se pueden hacer chips mucho más grandes, así que varios fabricantes comenzaron a usar diseños chiplet, que permiten unir dos o más chips en un único paquete. Es un estándar que ya están empleando gigantes como Intel, AMD, Qualcomm o ARM.
Este diseño chiplet que usan estas compañías permite que si en la fabricación se da un defecto, será más barato descartar un chip de 8 núcleos que uno de 32 núcleos. A su vez, permite combinar varios procesos de fabricación para abaratar costes empleando sólo el más novedoso, y costoso, para los núcleos y la cache del procesador.
Pero lo que Apple asegura que ha conseguido es que la unión de dos chips M1 Max dentro del M1 Ultra no esté sujeta a ninguna concesión y que, por lo tanto, el dos procesadores sí que ofrecen el doble de rendimiento. A este proceso, parecido al chiplet, lo denominan UltraFusion.
Éste consta de un intercomunicador de silicio que conecta los dos procesadores a través de 10.000 señales, lo que proporciona un gran ancho de banda de baja latencia entre ambos. Además, el sistema operativo reconoce al procesador como un único chip. Es por eso que lo que los desarrolladores no necesitan retocar sus programas para obtener el máximo rendimiento del M1 Ultra.
Si el M1 Max era brutal, multiplícalo por dos y consigues un M1 Ultra
El M1 Ultra cuenta con 16 núcleos de alto rendimiento, 4 núcleos de alta eficiencia, una gráfica integrada de 64 núcleos y la posibilidad de operar hasta con 128 GB de RAM unificada. Otra de sus ventajas es la de contar con dos chips de codificado y decodificado de vídeo. ¿El motivo? Son, literalmente, dos chips M1 Max unidos que, según la compañía, trabajan juntos como uno solo.
Apple asegura que el M1 Ultra ofrece un 90% más de rendimiento multihilo que el chip de 16 núcleos de PC más potente del mercado. Además, sorprendentemente alcanza este rendimiento usando 100 vatios menos. La compañía aclara que estos números son obtenidos al comparar su procesador con el i9-12900K de Intel, el más potente de la duodécima generación –recientemente lanzada al mercado–.
En las tareas donde la potencia de la tarjeta gráfica es el limitante y no el procesador, Apple promete igualar el rendimiento de una Nvidia RTX 3090. Nuevamente, consumiendo 200 vatios menos, que también sorprende. Está por ver si es sólo sobre el papel, o qué conjunto de aplicaciones para Mac pueden exprimir la GPU del M1 Ultra.
Al contar con una arquitectura de memoria unificada, el ancho de banda se ha incrementado hasta los 800 GB/s. La gráfica integrada es capaz de acceder a los 128 GB de RAM máximos con los que puede ser configurado. El M1 Ultra es el corazón del nuevo Mac Studio, un ordenador destinado para profesionales que fue presentado este martes junto con el nuevo procesador.
El M1 Ultra va a marcar una tendencia importante en el mundo de los procesadores
Apple ha logrado aumentar la velocidad y eficiencia de los procesadores del iPhone todos los años refinando minuciosamente la arquitectura con la que éstos están diseñados y fabricados. Sin embargo, desde la llegada de sus chips propios para sus ordenadores Mac, podemos observar un enfoque muy diferente. Al estar montados sobre ordenadores, donde el espacio y la disipación del calor no es tan limitante como en los smartphones, la compañía se ha decidido a aumentar potencia no sólo mejorando la arquitectura, sino por fuerza bruta.
Esto permite a Apple lanzar familias de productos muy diferenciadas en cuanto a prestaciones y precio partiendo del diseño de un único chip. Si Apple puede unir ocho chips M1 sin perder rendimiento o disparar su consumo, en el futuro podrá unir ocho procesadores M2 y conseguir, otra vez, incrementar en un 800% su desempeño. Cualquier pequeña mejora de rendimiento en arquitectura que se logre en el futuro, siguiendo este proceso UltraFusion, tendrá un gran impacto en el rendimiento general de futuros equipos.