El cáñamo (Cannabis sativa), del que se extrae la marihuana, se podría unir al arsenal de armas contra la COVID-19 del que poco a poco vamos disponiendo. Al menos, esa es la conclusión de un estudio publicado recientemente en Journal of Natural Products. Sin embargo, si estás pensando en fumarte unos porritos para mantener alejado al coronavirus, lamentamos decirte que eso no servirá de nada. El tema no funciona así.
Lo que han visto los autores del estudio, procedentes de la Universidad Estatal de Oregon, es que, in vitro (en condiciones de laboratorio), puede afectar a la capacidad del virus para infectar nuestras células.
Es importante incidir en que se ha visto solo en el laboratorio, porque no es lo mismo un puñado de células cultivadas en una placa de Petri (esas plaquitas redondas que se usan en los laboratorios), que esas mismas células formando parte de un organismo vivo completo. Lo que funciona de una forma puede no servir de otra. No obstante, los resultados han sido tan prometedores que estos investigadores creen que podrían estar en el buen camino para el desarrollo futuro de un antiviral a base de dos ingredientes procedentes del cáñamo, del que se extrae la marihuana.
No es droga todo lo que florece
El cáñamo es la planta de la que se obtiene la marihuana, pero no todo en la planta tiene efectos psicoactivos.
Dichos efectos los genera un compuesto concreto, llamado tetrahidrocannabinol (THC). Pero la planta contiene otras muchas sustancias con potencial para convertirse en principios activos farmacológicos. Por eso, en la Unión Europea se estableció que las plantaciones legales de cáñamo no podían contener más de un 0,3% de THC. Por encima de ese porcentaje, la planta ya se conoce popularmente como marihuana, aunque este es también el nombre que se da al conjunto de hojas secas que se consumen como droga.
Sin embargo, el compuesto que nos interesa en este caso no es el THC, sino otras dos sustancias llamadas ácido cannabigerólico o (CBGA) y ácido cannabidiólico (CBDA). Esa es la primera razón por la que fumar porros no te ayudará contra el coronavirus. Pero veamos qué es lo que dice el estudio.
¿Cómo ayuda el cáñamo, origen de la marihuana, a combatir el coronavirus?
Los autores de este estudio probaron el efecto de diferentes compuestos contra el coronavirus y descubrieron que el CBGA y el CBDA eran muy prometedores.
Se dieron cuenta con un experimento sencillo. En una placa de Petri se cultivaron células epiteliales, como las que infecta el coronavirus en el cuerpo humano. Después, añadieron las dos sustancias extraídas del cáñamo –entre ellas la marihuana– y, para terminar, añadieron a la mezcla la proteína espiga del coronavirus. Esta es la proteína que usa el patógeno como llave para entrar a las células que infecta. Se une a unos receptores, llamados ACE2, de una forma muy específica, como una llave que entra en una cerradura. Por eso, si se bloquea, se puede detener la infección.
Y eso es lo que parecen hacer tanto CBGA y CBDA. Observaron que podían bloquear la proteína, como si colocamos un dedal sobre una llave. De este modo, ya no encaja en la cerradura y no puede abrir la puerta. En este caso ocurría lo mismo. Cuando estas dos sustancias se unían a la proteína espiga, esta ya no podía unirse a los receptores de las células para infectarlas.
Todo esto lleva a pensar que estos ácidos podrían ser útiles para el desarrollo de un fármaco contra el coronavirus. Tanto para prevenir la infección como para acortar el periodo sintomático. Pero también hacen un llamamiento a la calma recordando sus limitaciones. Para empezar, todo el estudio se ha llevado a cabo in vitro. Habría que seguir investigando hasta poder repetirlo in vivo, directamente en pacientes como uso terapeútico de la marihuana u otros derivados del cáñamo.
Por otro lado, solo se ha investigado con las variantes alfa y beta, por lo que no saben si sería igual de eficaz con delta y ómicron, que son las dos dominantes en la actualidad.
Lo bueno es que tanto CBGA como CBDA ya se han estudiado con anterioridad con otros fines farmacológicos, por lo que ya se sabe que su consumo oral es seguro para los seres humanos. Tener ya esta información es todo un paso adelante, pero no significa que su uso antiviral esté a la vuelta de la esquina. Por suerte, sí que contamos ya con otros antivirales aprobados para su uso en pacientes de riesgo, que seguro que serán un gran aliciente para seguir avanzando en lo que nos queda de pandemia. Quizás estos se sumen a ellos en un futuro, pero no dejamos de insistir: solo como fármacos. Suelta ese porro de marihuana.