La segunda temporada de The Witcher ya está disponible en Netflix. La inmediata continuación del éxito del 2019 de Netflix promete enmendar los errores de la primera y ampliar la historia. Pero a dos años de distancia (y en en una época con una enorme cantidad de contenido) los detalles de los primeros capítulos parecen muy lejanos.
Para buena cantidad de los fans, The Witcher se relaciona más con la serie de libros de Andrzej Sapkowski y el videojuego que con la serie. De modo que para comprender la dinámica y ritmo de la versión televisiva, es necesario refrescar la historia. En especial, cuando la segunda temporada será una revisión del Universo al completo de Geralt de Rivia.
¿Qué necesitas saber — o recordar — sobre la serie? Te dejamos una lista de tres cosas rápidas que debes saber para que puedas disfrutar mejor de la segunda temporada.
Una de las cosas esenciales a recordar de la primera temporada, es la forma como el guion desarrolla la historia de sus personajes. En especial, la manera en que une a las tres líneas principales. En un intento de hacer la narración más dinámica, The Witcher se desarrolló de forma no lineal.
Geralt de Rivia, Yennefer y Ciri, esas enmarañadas líneas de tiempo
The Witcher contó las historias de Geralt (Henry Cavill), Yennefer (Anya Chalotra) y Ciri (Freya Allan) en hilos paralelos que terminaban por unirse. Eso a pesar que sucedían en diferentes momentos del tiempo y no había indicios reales de algún elemento los separaba o lo unía.
La primera aparición de Geralt de Rivia en la serie ocurre 40 años antes de la caída de Cintra. Es el punto cronológico más antiguo del programa. Con el apodo de “El Carnicero de Blaviken”, Geralt es por entonces una mezcla entre guerrero y criatura temible.
En cuanto a Yennefer, le conocemos como una joven deforme que termina por entrenarse para convertirse en hechicera en Aretuza. Por su parte Ciri, es la princesa de Cintra, unida a Geralt después que este invocó la Ley de la Sorpresa.
Pero al final, todos se unían en un punto único: el momento en que Geralt y Ciri se reencontraban. Además, en el gran despliegue final del poder de Yennefer. Así que recuerda: en The Witcher nada es lo que parece y todo transcurre a su propio ritmo.
Un cazador de monstruos en medio de la espesura
En general, lo único que debes tener claro para la segunda temporada de The Witcher es que Geralt de Rivia es un cazador de monstruos. Un dato que coincide con la historia del personaje en el mundo literario y en el del videojuego. Uno que además es un mercenario y que vende sus servicios al mejor postor. También, que como todos los brujos de la historia es despreciado y temido a partes iguales.
La acción transcurre en El Continente, un lugar agreste y hostil. El territorio colinda por el este con el desierto de Korath y por el oeste con Gran Mar. Según la saga literaria, el mundo en que habita Geralt de Rivia fue creado por la conjunción de las esferas. Una historia que se extiende 1.500 años antes del comienzo de la del brujo.
La invocación de la Ley de la sorpresa en The Witcher
Geralt y Ciri están unidos por la Ley de la Sorpresa. Se trata de una antiquísima tradición que permite que un hombre exija una recompensa al salvar la vida del otro. Pero no hay forma de predecir qué puede pedir el salvador. En la primera temporada The Witcher, Geralt invoca el antiguo derecho para salvar la vida del hombre que se atrevió a pedir la mano de Pavetta, princesa de Cintra. Eso, a pesar de su aspecto deforme y de la oposición de la corte.
Geralt exige a Dunny “lo que tiene pero no sabe”. Para entonces, Pavetta está embaraza de Ciri y el vínculo termina por unir a la princesa aún no nacida con el brujo. La temporada termina con el encuentro de Geralt y la princesa para honrar la vieja magia que los une de forma definitiva a futuro.