Amazon retirará Alexa, un servicio gratuito que ofrecía datos estadísticos de webs. Fue funndado en 1996 por Brewster Kahle —también conocido por ser el creador del Internet Archive— y Bruce Gilliat.
Alexa Internet fue adquirido por Amazon en 1999 por unos 250 millones de dólares en acciones. Pocos años más tarde llegaron, incluso, a tener un acuerdo estratégico con Google. Casualmente se llama igual que el asistente de voz virtual de la compañía.
Especialmente conocido por el Alexa Rank, un controversial ránking de las webs más populares del mundo, era bastante usado y referenciado a finales de los noventa y principios del siglo XXI. La metodología siempre fue cuestionable y, como suele ocurrir en estos casos, fácil de engañar. Los datos eran extraídos de personas con una extensión de navegador y las webs que elegían instalar unas líneas de código.
Alexa también lanzó en su momento —en parte para acallar críticas— un servicio profesional llamado Alexa Pro. Este ofrecía un plan de certificación de estadísticas en una web. El objetivo era medir con mucha más exactitud el tráfico y permitir desplegar datos como páginas vistas o usuarios únicos.
Amazon cerrará Alexa Internet el 1 de mayo de 2022. Dejó de de aceptar nuevas suscripciones ayer 8 de diciembre. Aquellos clientes de pago podrán exportar todos los datos de la cuenta y eliminarla. Llegaron a registrar más de 400 millones de visitantes mensuales, y llevar registro de más de 30 millones de webs.
Pocos servicios fueron tan representativos de la Web 1.0 como lo fue Alexa. En la actualidad SimilarWeb hace algo similar y es igual de controversial. Sobre todo porque también muestra datos de tráfico que no necesariamente se acercan a la realidad.
Alexa, el asistente virtual, originalmente se llamaba Ivona
Aunque ambos servicios de Amazon coincidieron con el uso del mismo nombre, los motivos y el origen de cada uno de ellos fueron distintos.
Alexa, el asistente virtual de Amazon, originalmente se llamaba Ivona, se inventó en Polonia, por una empresa llamada igual, Ivona Software la cual adquirieron en 2010. Parte del motivo por el cual decidieron cambiarle el nombre es porque la pronunciación del nombre es poco usual y fácil de reconocer por una máquina, sobre todo por la presencia de la X.
En cambio, la decisión de usar el nombre de Alexa por parte del ránking de webs que está por cerrar, fue por la semejanza con la Biblioteca de Alejandría.