No hay mes del año en el que Xiaomi no lance un nuevo móvil. Ya sea bajo la ahora difunta nomenclatura Mi, mediante la gama Redmi o a través de la marca Poco. Esta última, si bien no es la más conocida de todas, tiene algunos de los smartphones más interesantes del fabricante asiático. Los móviles Poco suelen destacar por ofrecer un excelente rendimiento a un precio muy reducido. Para ello, Xiaomi prescinde de algunas características clave que a menudo elevan los costes del terminal. Por ejemplo, materiales premium o una configuración de cámara más avanzada. ¿Qué ha sacrificado en este nuevo Poco M4 Pro para conseguir que cueste menos de 200 euros?
Lo cierto es que el nuevo smartphone de Poco es algo diferente al resto de sus compañeros. En este caso, el M4 Pro no solo destaca por su rendimiento. También lo hace por su pantalla o autonomía. Para ello, intenta ofrecer un equilibrio entre estas prestaciones. Lo hace con un procesador potente, pero no tan avanzado como el de su hermano mayor, el Poco F3. Su pantalla, además, presume de ofrecer una tasa de 90 Hz y su batería tiene nada más y nada menos que 5.000 mAh.
Ahora bien, ¿es suficiente este balance para destacar frente al resto de modelos que se sitúan por debajo de los 200 euros?, ¿o es solo una alternativa más a sus hermanos de la gama Redmi?
Las tres bazas del Poco M4 Pro
Xiaomi presume de una experiencia fluida en este poco M4 Pro. Esto se debe tanto a la pantalla, como al rendimiento. En este caso, y comenzando por su potencia, el terminal cuenta con un chipset MediaTek Dimensity 810, un SoC con conectividad 5G y de ocho núcleos que está acompañado con 4 GB de RAM y 64 GB de memoria interna. Una configuración que, a priori, puede parecer algo escasa en RAM y almacenamiento. No obstante, parece haber sido un límite importante para establecer un precio por debajo de los 200 euros. Xiaomi, de hecho, también comercializa una variante con 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento interno que puede ofrecer una mejor experiencia en el rendimiento y que apenas cuesta 20 euros más.
El comportamiento de este smartphones es el que cabe esperar en un móvil de 200 euros. Es posible navegar por apps, redes sociales o jugar puntualmente sin ningún problema. Siempre y cuando, eso sí, mantengamos una buena gestión de los procesos en segundo plano. Por ejemplo, jugar mientras las aplicaciones se actualizan automáticamente puede afectar al rendimiento.
¿Está la pantalla a la altura? ¿Qué tal es su batería?
La pantalla, otra de las bazas del Poco M4 Pro, también deja un buen sabor de boca. En parte, gracias a su tasa de refresco. En este caso, la marca ha apostado por un panel LCD de 6,6 pulgadas con resolución Full HD+ (2.400 x 1.080 píxeles) y una frecuencia de actualización de pantalla de 90 Hz. Esta es adaptativa. Es decir, es capaz de ofrecer 50 Hz en situaciones donde no se requiere un movimiento tan fluido —por ejemplo, cuando estamos viendo una imagen—, mientras que los 90 Hz se activan al navegar por la interfaz, para ofrecer una mejor experiencia en las animaciones o al hacer scroll por las diferentes aplicaciones.
En la pantalla sucede algo similar que en el rendimiento. Por su precio, los resultados son los esperados. Ofrece buena nitidez gracias a su alta resolución, la tasa de refresco eleva la experiencia de usuario al navegar por la interfaz y los colores están correctamente interpretados. En algunos casos, sobre todo cuando el terminal está inclinado o encima de una superficie, como una mesa, los flojos ángulos de visión impiden ver el contenido correctamente, lo que obliga a elevar el dispositivo para leer, por ejemplo, una notificación.
La batería es el tercer y último punto destacable del Poco M4 Pro, pero no por ello el menos interesante. De hecho, la autonomía es uno de los aspectos que más me ha gustado de este smartphone. El móvil de Poco tiene una batería de 5.000 mAh. Una capacidad más que adecuada que ayuda a conseguir unos excelentes resultados. El dispositivo puede llegar al final del día con un uso intensivo sin ningún problema, incluso con niveles de brillo máximo y a una frecuencia de actualización elevada. Ajustando algunos parámetros, como el uso de apps, el brillo o activando alguno de los modos de ahorro de batería que dispone el terminal, podemos conseguir todavía mejores resultados. Sin olvidar, además, de que incluye carga rápida.
Diseño y cámara: poco de que hablar
Una batería de tanta capacidad podría verse reflejada en el aspecto, con un grosor mayor al resto de smartphones o un peso ligeramente superior. Sin embargo, el Poco M4 Pro es todo lo contrario. Bien porque no cuenta con componentes tan pesados, como un módulo fotográfico más avanzado o una trasera cristal o aluminio, o porque Xiaomi ha hecho un muy buen trabajo camuflando el grosor, dado a que el móvil cuenta con una ligera curvatura en la trasera que puede disimular el espesor al mismo tiempo que ofrece un buen agarre.
Y hablando de la trasera, el Poco M4 Pro es, en general, un smartphone bonito. La cubierta de policarbonato no se tiente tan premium como otros terminales de la marca, pero su color y ese enorme módulo fotográfico hacen que luzca más elegante de lo que realmente se siente en la mano.
Curiosamente, la zona del sensor es solo un disfraz. El Poco M4 Pro no juega en la liga más alta del apartado fotográfico. De hecho, es posiblemente el apartado donde la compañía más ha recortado para conseguir un precio inferior a los 200 euros. A pesar de ese gran módulo de cámara que vemos en la parte posterior, el terminal cuenta con un doble sensor.
La cámara principal, que es de 50 megapíxeles (aunque esta resolución no viene activada por defecto), obtiene unos resultados que, pare su precio, son muy previsibles. Algo pobres a nivel de brillo y color y con un escaso nivel de detalles en aquellas zonas con sombra. A plena luz del día y con buena iluminación se pueden conseguir buenas fotografías. En interiores, de nuevo, vemos esa falta de detalle en las zonas más oscuras.
El terminal cuenta, además, con una cámara ultra gran angular de 8 megapíxeles de resolución. Útil para obtener resultados panorámicos y captar más información en una sola imagen, pero con falta de detalle y el clásico efecto granulado en los cantos. Lo habitual en smartphones con este precio.
¿Merece la pena el nuevo móvil de Poco?
El Poco M4 Pro se puede adquirir a un precio de 199 euros para la versión de 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento interno. La compañía también vende una versión más potente, con 6 GB de RAM y 128 GB de memoria interna, a un precio de 219 euros. ¿Es una buena opción de compra?
El nuevo gama de entrada de Poco ha demostrado ofrecer ese equilibrio entre las tres prestaciones clave que tanto parece destacar el fabricante: rendimiento, pantalla y autonomía. Lo hace sin sacrificar en diseño, ofreciendo un aspecto "premium" camuflado bajo un cuerpo de policarbonato y un módulo fotográfico que poco tiene que ver con la realidad, pero que luce muy bien. En los tres mencionados apartados se comporta muy bien, destacando, sobre todo, en su autonomía.
Hay otros detalles que también son dignos de mencionar y que pueden ayudar mucho en tu decisión de compra. El Poco M4 Pro tiene conectividad NFC, por lo que es posible realizar pagos móviles a través de apps como Google Pay. También cuenta con sensor de infrarrojos y audio estéreo. El software, vitaminado por MIUI 12, tiene un punto que a mi parecer, es bastante negativo: está cargado de aplicaciones preinstaladas. De hecho, al configurar por primera vez el dispositivo dudé si había realizado una copia de seguridad de mi antiguo smartphone. Afortunadamente, muchas de ellas se pueden desinstalar.
El Poco M4 Pro es, al fin y al cabo, una alternativa más por 200 euros. Es cuestión de prioridades si decantarse por este smartphone u otro de su gama. Por ejemplo, si buscas un terminal que ofrezca buenos resultados a nivel de autonomía y que salga bien aparado en rendimiento y pantalla, el Poco M4 Pro es la mejor opción. Si por el contrario, necesitas un móvil más potente para jugar o priorizas en el apartado fotográfico, el Poco X3 NFC, que puede adquirirse a un precio de unos 220 euros, también es una interesante opción.