El lanzamiento de un juego basado en una franquicia de Marvel siempre será un suceso relevante para el mundo del entretenimiento. Es precisamente esa expectación, que de alguna manera nace “respaldada” por el éxito de las películas, la que podría convertirse en un arma de doble filo para la compañía que tiene el proyecto en sus manos. La propia Square Enix experimentó un panorama negativo cuando el tan esperado Marvel’s Avengers no cumplió con lo esperado en 2020.
La anterior situación, por desgracia, le pasó factura a Marvel's Guardianes de la Galaxia, cuyo anuncio pasó un tanto desapercibido a causa del precedente que marcó el título de los Vengadores. Sin embargo, es posible que esa falta de reflectores haya permitido que Eidos Montreal trabajara sin la habitual presión que generan este tipo de proyectos. Esa tranquilidad, aunada a la sobrada experiencia del equipo canadiense, se reflejó en un título que, para sorpresa de muchos, resultó ser excelente.
No es ninguna broma, Guardianes de la Galaxia es una de las grandes revelaciones del año. Una gran parte de sus cualidades se debe a que Eidos tuvo la libertad creativa de construir su propia camino tanto en lo narrativo como en lo jugable. No estamos ante un título guiado por un modelo de negocio forzado, ni con experimentos raros que terminan implementados a medias.
En su lugar, apostaron por algo más tradicional: una experiencia para un solo jugador cuyas fortalezas son una historia entretenida con acción constante y una jugabilidad que transmite muy buenas sensaciones. Partiendo de esa base, que debería ser la de cualquier juego de superhéroes, Guardianes de la Galaxia consigue atraparte de principio a fin.
Otro punto fundamental es que Star-Lord es el principal protagonista de la aventura. Esta decisión, que para algunos podría parecer equivocada dada la presencia de otros personajes, tiene como fin aprovechar al máximo las habilidades del mencionado superhéroe. Además, del carismático grupo de guerreros, Peter Quill es quien tiene el mayor abanico de movimientos y ataques. Ojo, esto no significa que los demás no intervienen, pero sobre esto profundizaré más adelante.
Al proponer una experiencia para un solo jugador, la narrativa es una pieza esencial del juego. Afortunadamente, Guardianes de la Galaxia cumple de sobra en este apartado. Lo anterior se consigue, mayoritariamente, porque apuesta por una historia original alejada del Universo Cinematográfico de Marvel. Puedes olvidarte de todo lo que sucede en la pantalla grande, aquí no tiene lugar. El hecho de disfrutar una historia que no se había contado previamente, desde luego, incrementa tu interés por saber cómo se desarrolla la misma.
Eidos pudo usar a los héroes a su conveniencia, llevándolos a explorar diferentes mundos e involucrándolos en situaciones tan disparatadas como divertidas. Eso sí, el juego tiene muchas referencias a los cómics, empezando por las ubicaciones. Si eres un verdadero fan de Marvel, seguramente las sabrás identificar, al menos por el nombre. En cuanto el roster de villanos, también recurren a rostros conocidos en la historietas. Destaca el de Lady Hellbender o el de Raker, aunque no son los únicos que deberás enfrentar.
En un intento por darle variedad a la aventura, Eidos implementó un sistema de decisiones ligado a los diálogos. Al inicio parecía que no tendría demasiada repercusión, pero con el paso de las horas se fue haciendo más importante hasta convertirse en un componente clave. Básicamente, el transcurso de un nivel, inclusive la historia misma, pueden cambiar ligeramente en función de la decisión que hayas tomado.
Ahora bien, no esperes que las consecuencias de tus decisiones alteren el final de la historia como podría suceder, por ejemplo, en un RPG. No obstante, ciertamente contribuye a aumentar el nivel de rejugabilidad de Guardianes de la Galaxia. Tendrás la inquietud de volver a la campaña tomando diferentes decisiones, un añadido que siempre se agradece en una historia para un solo jugador.
Un punto que me pareció interesante es que, para conocer a los otros personajes de una manera "más personal", es necesario acercarnos a ellos mientras viajamos en la icónica Milano. Podría decirse que la nave se convierte en un centro de interacción social para entablar conversaciones más profundas y significativas. Estas charlas te dejarán con más de algún dato relevante sobre los miembros que conforman la tripulación.
En el terreno jugable, Guardianes de la Galaxia no toma muchos riesgos en relación a las capacidades del protagonista. En este sentido sí se mantiene alineado a lo ya visto en cómics y películas. Star-Lord posee sus inherentes blasters, domina el ataque cuerpo a cuerpo y se apoya en los propulsores de sus botas para sorprender al enemigo desde distintas posiciones. La acción está garantizada, pero es hasta que los otros personajes se involucran cuando el combate reluce.
Gamora, Rocket, Groot y Drax presumen habilidades únicas para apoyarte durante un enfrentamiento —o para resolver puzzles—. Sin embargo, lo más interesante es que tú mismo puedes ordenar su intervención según tus necesidades. Esta mecánica, evidentemente, tiene como objetivo hacer que los combates se sientan más dinámicos y que todos los personajes, pese a no estar enteramente bajo tu control, contribuyan en menor o mayor medida a superar a los enemigos que se interponen en el camino.
Todo lo relacionado al combate se sustenta, además, en un diseño de niveles que, pese a no ser abiertos, favorece el uso de las habilidades de los guardianes. Algunos escenarios incluso se prestan a cierta verticalidad. Toda esta diversión que obtienes al combatir no sería posible sin la correcta selección de enemigos. Sus ataques son diferentes entre sí y en más de una ocasión te verás en aprietos, sobre todo cuando tus compañeros no pueden ayudarte.
Hay dos experiencias en Guardianes de la Galaxia que sobresalen en jugabilidad. La primera tiene que ver con los enfrentamientos con jefes finales. No solo son desafiantes, también un auténtico espectáculo visual. La segunda son las batallas con naves espaciales a bordo de la Milano. La introducción de esta última es toda una sorpresa, pues funciona bastante bien en los controles y aporta una mayor variedad jugable a la aventura.
Visualmente, Eidos también ha realizado un trabajo sobresaliente. No es fácil volver a crear a un grupo de personajes cuyos rostros y voces están plenamente asociados a los actores del Universo Cinematográfico de Marvel. No obstante, su look es cercano al de los cómics. Por su parte, los fantásticos escenarios y la atmósfera que transmite cada uno de ellos, embellecen una ambientación que roza la excelencia.
En este punto también podemos hablar de un notable trabajo de doblaje que saca partido del humor tan característico de los guardianes y una banda sonora licenciada con grandes temas clásicos de los ochenta. Por ejemplo: Everybody Wants To Rule The World, de Tears for Fears; Take on Me, de A-ha; Never Goona Give You Up, de Rick Astley, y Relax, de Frankie Goes to Hollywood, por mencionar solo algunas de la excelente selección.
Respecto al apartado técnico, en términos generales Guardianes de la Galaxia está a la altura de lo que podrías esperar en un juego de 2021. Eso sí, no es un referente gráfico. La versión de PS5, que fue donde lo disfrutamos, ofrece dos modalidades visuales; una prioriza la resolución y la otra la tasa de fotogramas por segundo. Aunque optamos por la segunda opción, notamos algunas caídas de frames en momentos puntuales, especialmente cuando la escena demandaba más enemigos en pantalla.
Sin duda, Square Enix, de la mano de Eidos Montreal, ha encontrado la fórmula correcta para triunfar con un juego de superhéroes. Guardianes de la Galaxia te ofrecerá una aventura llena de diversión que fácilmente puede extenderse hasta las 20 horas. La narrativa, que es la mayor fortaleza del título junto a la jugabilidad, es digna de un grupo de héroes que ha cautivado a tantas personas en años recientes, y lo consigue apostando por una historia original. Es uno de los mejores juegos de superhéroes que puedes disfrutar actualmente y, por supuesto, se ganado un lugar entre lo más destacado de 2021.