Rivian, la startup de automoción que pretende competir contra Tesla, se ha convertido en el segundo fabricante estadounidense de vehículos. Tan solo por debajo de la compañía de Elon Musk. La firma de automoción comenzó sus andaduras en la bolsa hace apenas unas horas. Sus acciones tuvieron un valor inicial de 78 dólares por acción, consiguiendo unos 11.900 millones de dólares recaudados en los primeros inicios.

Ahora, y tras una subida del precio de las acciones a 106 dólares después su debút, Rivian posee una capitalización de mercado de 86.000 millones de dólares, según Bloomberg. Se trata de una cantidad mayor a la de fabricantes como Ford o General Motors. El objetivo de la startup era recaudar unos 10.000 millones de dólares para mejorar la producción de sus vehículos eléctricos en su planta de Estados Unidos. Además de iniciar la fabricación de sus coches en otros mercados para cumplir el número de pedidos

Rivian lleva años operando en el mercado de la automoción sostenible, pero no fue hasta 2019 cuando saltó a la fama por dos de sus automóviles eléctricos, los Pick-Up R1T y SUV R1S. Estas camionetas, que destacan por su versatilidad, potencia y por ser 100% eléctricas, recibieron una gran cantidad de pedidos. El fabricante, sin embargo, tuvo problemas para producir un tan elevado número de vehículos. Hasta ahora, solo han entregando 165 modelos de su R1T. La mayoría a aquellos empleados de la compañía que lo adquirieron previamente. Esperan, eso sí, enviar 55.400 unidades de sus dos modelos para 2023.

Amazon y Ford también confían en Rivian

Rivian

El futuro de la compañía de movilidad eléctrica, sin embargo, es todavía más prometedor. Rivian, que inició su andadura en el mundo de los vehículos eléctricos bajo el nombre Mainstream Motors, ha contado con el apoyo de Amazon, quien en 2019 anunció una inversión de 700 millones de dólares en la pequeña empresa y la compra de 10.000 vehículos que pasarían a formar parte de su flota de automóviles de reparto en 2022. La compañía de Jeff Bezos posee, concretamente, el 20,2% de las acciones de la startup fundada por Robert Joseph.

Ford es otra de las grandes empresas que ha apostado por Rivian con una inversión de 500 millones. Supone, por lo tanto, un 13% de las participaciones de Rivian. La multinacional estadounidense se interesó en 2019 por la startup de automoción y, en concreto, por la plataforma de los R1T y R1S que se utilizará en sus próximos vehículos eléctricos.